BCCCAP00000000000000000001376

48. La Virgen niña, según Muríllo. María es la mujer más conocida, la :nás frecuentemente nombrada, pintada, escdpi– da entre todas las mujeres, en la literatura. las artes y la cultura humana. Deberíamos aspi– rar a conocer lo más profundamente posible a María, porque cuantos la han conocido de verdad a lo largo de dos mil años, expresan su admirado agradecimiento hacia Ella. Retrato de María Se podría hacer una doble historia de María, afirma René Laurentin: • La historia de su vida cotidiana, según los métodos de la nueva historiografía, para llegar a tientas a lo material y lo espir~tual de cada día en su vida de pobre. Esto está aún por hacer. 62 • La histeria más clásica de los aconteci– mientos de su vida, porque en la monotonía diaria, l'v:aría v~vió una aventura única. Fue en Kazaret, aquella aldea alejada y desconocida, donde se tejió la relación nueva y fundamen– tal de Dios-Aoor con los hombres; y es~o se realizó 5egúr.. los acontecimientos que narra el Evang:elio. Infancia y juventud de María Nada nos dice la Biblia sobre la infan:::ia y juventud de fbría. María es y está en función de Cristo. Los evangelistas nos dan a conocer la "obra de er~sto". Prescinden de todo aque– llo que no sirva para un mayor escla::-eci– miento ce ese objetivo. No vamos a recurrir a las revelaciones apócrifas y pivadas. Las Vidas de María es– critas por Maó Ágreda, Catalina EmmeLch y otras, qu~ la han visto más o menos desfilar como u.:. filme ante sus ojos, son tributarias en diversos grados del Protoevangelio de Santiago lib::-o apócrifo con ciertos valores, pero sin ·,ralo::- histórico. El Prctoevc..ngelio de Santiago da muestras no sólo de fervor por María, sino también de intuiciones profundas sobre su santidad. su virginidad. .. Pero, a pesar de su antigüedad (mediacos del siglo 11), revela una gran igno– rancia de las costumbres judías y de las leyes que reg:an el templo de Jerusalén. Está fuera de toda veros~militud que se pudiera criar en él una niñita de tres años; y esto en el Sc..ncta Sancton..:.m, reservado al sacerdote en cir– cunstancias e:xí:raordinarias. Si la liturgia :::ele– bra la P::-esentlción de María (21 noviembre) es porque este relato simbólico significa el don ma::-avilloso que María hizo de sí m?Sma, en el despertar de su conciencia, ella que ha– bía sido llena de gracia desde el primer ins– tante. Las dvergencias entre estas Vidas "revela– cas", escritas por las místicas antes citadas, sus punt:::>s ce fricción con los datos históri– cos, nos ponen en guardia respecto de su fia– bilidad. Aunq-Je sus iluminaciones han coin-