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Terminé el trabajo titánico de la cimenta– ción enorme del templo, y entonces cobré nuevos bríos, pues había vencido la mayor de las dificultades: la idea general de que el tem– plo no se cimentaría. El señor cardenal bendi– jo la primera piedra que pusieron los reyes, y habló de lo satisfactorio que era erigir tem– plos ... El rey en levantadas frases enlazó la patria, la religión y las artes españolas; y entu– siasmó al pueblo, haciéndole derramar lágri– mas, cuando recordó a la reina Mercedes, ini– ciadora de la construcción del templo de la Almudena. .. El marqués de Cubas. Madrid, 19 noviem– bre 1886". A partir de aquí, seguimos fundamental– mente al arquitecto don Fernando Chueca Goitia, quien junto con el también arquitecto Carlos Sidro, ganó el Concurso nacional para el proyecto que acaba de concluir. • El proyecto del marqués de Cubas Francisco de Cubas, que gozó en su vida de todas las mieles del éxito y de la fortuna, en lo único que fracasó fue en no ver conver– tida en realidad su obra magna, iniciada con tan buenos auspicios. Cubas nació en 1826, en el seno de una modesta familia, pero supo con su trabajo y laboriosidad, amén de otras virtudes, escalar los más altos puestos de la socied"-d, las fi– nanzas y la política ... La Restauración alfonsi– na fue el momento propicio para la ascen– sión de este arquitecto que, por su enlace con doña Matilde de Erice y Urquijo, había entrado en la nueva aristocracia madrileña, que gozaba del apoyo de la Iglesia, y que al 39. Entrada a la cripta de la catedral de la Almudena, proyectada y dirigida por el marqués de Cubas. Calle Mayor-Cuesta de la Vega. 51