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34. Fachada de la Vicaria General Castrense, antes iglesia de las Religiosas Bernardas. Aquí permaneció la imagen de Santa Maria de la Almudena varias temporadas. En 1850 la iglesia se hallaba cerrada al cul– to y la imagen de Nuestra Señora trasladada a la iglesia de las Bernardas, pues "se estaban ejecutando obras de consideración", informa Mesonero Romanos. En 1855 debía de estar completamente restaurada y abierta al públi– co, como se nos manifiesta en una pintura de Ramón Soldevilla en la que se representa a la reina Isabel II y su esposo visitando el Monumento de Jueves Santo en esta iglesia, en el momento de pasar al interior. • Un templo de poca categoría para la capital de .España El edificio, a través de las noticias que nos han llegado, era de poca importancia para ser el principal de la Villa. Los historiadores alaban su antigüedad, pero no elogian su ar– quitectura. Baena escribe: "Lo material de es- 44 te templo es antiquísimo y estrecho" . P,::mz: "El edificio es pequeño y de comunísima ar– quitectura". Mesonero Romanos: "Pequeño y de mezquina arquitectura". Quadr;:,.do : "Humilde templo, no corresponde ni al pue– blo ni a la im2.gen". Una buena fuente de información, ade– más de los rr:.apas de Texeira y Espinos2., es la representación que aparece en la maq-Jeta de Madrid, realizada por J. Monasterio, y con– servada en el Museo Municipal. En ella se aprecia q-Je el edificio de la iglesia, así como el de la torre, es de mampostería con hiladas de ladrillo, al cual se han añadido otras de– pendencias, como son las capillas. La iglesia era de tres naves, con crucero cubierto con cúpula y chapitel. La portada, que daba a la calle Mayo::-, se organizaba por un arco de medio punto, en– tre dos parejas de pilastras y, encima, un f::-on– tón. La cabecera estaba formada por el presbi– terio y camarn de la Virgen, con una ventana voladiza o ajimez para dar luz a ésta. El lado norte daba a ~a plaza de Santa María; en ella se encont::-aba la puerta de Reyes, llamad2. así porque era la utilizada por la familia real para entrar en la iglesia. Tenía un arco de medio punto con dovelas resaltadas y, encima, un balcón. Junto a ella se encontraba la torre :nu– déjar, que seg1ía modelos toledanos, con dos huecos a cada lado en el cuerpo de venta:: 1.as, y cubierta con un chapitel del siglo XVII. La parte occidental daba a la actual calle de Bailén. • Altar mayor Ocupaba todo el testero y fue revestido de plata por la Congregación de la Esclavituci, decorado con repujados y labo– res; de él escribe Ponz que era rico en plata, "e::i cuanto al arte no lo es". En el centro se abría el c2.marín con la imagen de la Virgen, que estaba situada en un rico trono regalado por el Aycntamiento en 1640. En las calles la– terales estaban San José y San Joaquín. En el ático se encor:.traba la pintura El Milagro del Pozo de Alonso Cano. El matrimonio Isidro y María de la Cabeza recobran sano y salvo a