BCCCAP00000000000000000001376

de sus obispos, sino todo lo contrario, con el mal ejemplo de su defección. De la existencia de estas iglesias, situadas en el interior de la Península, cabe deducir la existencia de otras comunidades más antiguas en otras provincias mucho más romanizadas y más accesibles, como la Tarraconense y la Bética. La presencia del cristianismo en España está totalmente asegurada para todo el siglo II por lo menos. A partir de la segunda mitad del III son muchos los documentos históricos que nos hablan de las iglesias establecidas en España: Actas de San Fructuoso, Augurio y Eulogib; Mártires de Zaragoza; Santas Justa y Rufina; y sobre todo las Actas del concilio de Elvira– Granada (¿hacia el 300-). ALGUNAS TRADICIONES SOBRE LOS ORÍGENES DEL CRISTIANISMO EN ESPAÑA Hemos examinado los datos históricos más antiguos que conocemos actualmente. Sin embargo, nada hemos dicho de la pre– sencia de Santiago en España. ¿Predicó Santiago en España? La tradición sobre la predicación del após– tol Santiago en España aparece desarrollada en un documento de finales del siglo XIII o principios del XIV cocservado en un códice del archivo de la basílica del Pilar, de Zaragoza. Contiene este texto, además, la pri– mera mención de la aparición de la Virgen a Santiago en cuerpo mortal. Según este documento, Santiago el Mayor, hijo del Zebedeo, recibe el mandato de Cristo de venir a España a predicar la Palabra de Dios. Obtiene previamente la bendición de la Virgen, quien le ordena que en la ciudad de España en que mayor número de hombres convirtiese a la fe le edifique una iglesia en su memoria. Parte Santiago para España, re– corre Asturias, convirtiendo a uno solo en Oviedo. Pasa a Gal ~cia, predicando en Padrón. Se dirige después a Castilla, y por fin 4. Santas Justa y Rujina, mártires a principios del siglo IV, en la Bética, por Bartolomé Esteban Murillo. a Aragón. Preé.ica muchos días allí, y logra convertir a ocho hombres. Junto al Ebro tiene lugar la visita de la Virgen; se le aparece so– bre una columna, entre millares de ángeles · que cantan maitines. La Virgen manda al Apóstol que edifique allí el altar y la capilla. Los ángeles devuelven a la Virgen a Jerusalén, mientras que Santiago comienza inmediatamente la construcción de la iglesia. A continuación, ordena de presbítero a uno de los ocho convertidos y se vuelve a Judea. He aquí, en resumen, la legendaria narra– ción del documento medieval. Pero la noticia escueta de la ?redicación de Santiago en España es anterior. La más antigua que cono– cemos hasta ahora parece ser la contenida en el Breviarium Apostolorum, documento re– dactado, al parecer, hacia el año 600. Dice así el Breviario: ''.Jacobo, hijo de Zebedeo, her– mano de Juan; predica en España y regiones de Occidente; ::nurió degollado por espada bajo Herodes y fue sepultado en Achaia Marmarica el 25 de julio". 9