BCCCAP00000000000000000001375

Partiendo :ie la tierra con todo su peso de pecado y materia, se tiende hacia el cielo, meta y simbolismo del cuatro. Lienzo de línea tenebrista, tiene su· punto de luz en el ángulo superior dere– cho que sirve de señal para el camino que el ángel y su acompañante deben segmr. En la solución espacial que Anti– vedutto ado¡:::a en este cuadro, se nota el abandono de la profundidad y la abolición del concepto de cuadro como venta::1a abierta a un espacio imaginario. La superficie pictórica apa– rece restaure.da en su valor plano del que destacan las figuras que caminan hacia adelante al encuentro del espec– tador. El ángel destaca como un tipo humano, de majestuosa elegancia, en contraste con el niño, de mirada fija y con su cuerpo inocentemente des– nudo. Ambas figuras se concentran en íntima relación. Al brazo derecho del ángel que señala el camino a seguir, corresponde el pie izquierdo del niño, como algo rígido e inexorable. En contraste con esta obligación, está eJ brazo izquierdo que cae con naturalidad, como una fuerza que guía a través del áncora, pero dejando en libertad al guiado . El niño lleva en su mano otro símbolo alegórico: para este viaje hay un alimento: la Eucaris– tía . .El cuadro, con esquemas preesta– blecidos, no carece de calidad, tal vez le falte contenido interior. Los persona– jes están ejecutados con artificiosa frialdad, en posturas retóricas y teatra– les, como dos bajorrelieves que avanzan desde la obscuridad. SAN JERONIMO Pintura del siglo XVII de temática religiosa que recoge la figura de San Jerónimo er.:regado a la meditación y penitencia. El cuadro está dividido en dos partes. La primera la ocupan dos figuras animadas: San Jerónimo y el león. La segunda e. paisaje que presta profun– didad y perspectiva. El santo penitente destaca sobre un fondo obscuro, lo que le hace adquirir cualidades escultóricas. lMartl'n de Vos? La tela que cubre su cuerpo nos habla del colorido veneciano, demasia– do rica para un asceta retirado en una cueva que adquiere el sentido tradicio– nal de renuncia, de tumba voluntaria, de noche obscura del alma. Hay un predominio de colores cálidos en los primeros planos y· fríos en los segundos. El colorido tiene una distribución zonal. En un cuadro religioso el paisaje cobra sentido en cuanto es redimido y 89