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Padre Presidente "quien no la negaría pedida que sea, bien quiera tomar recreación de paseo, bien practicar alguna diligencia en el Sitio o pob la– ción de Madrid" < 62 ), pero siempre deberá ser acompañado y todos debe– rán ir "con hábitos talares de sotar.a, manteo y sombrero de teja'' < 62 ). ¿Qué era entre tanto de la Capilla y de la Imagen? Pensamos que durante la estancia de los Padres Capellanes fueron llevadas a buen término las obras comenzadas con anterioridad. Conocemos que en 1862 se informaoa desde la dirección del Patrimonio que eran precisas algunas reparaciones "y en particular en el suelo de la entrada de la Capilla del Santísimo Cristo que hay hundido un trozo de pavimento" < 63 )_ Academia de música. Ignoramos muchos datos de est:::>s "Padres Capellanes", que en 1865 veían con dolor. cómo tenían que abandonar el lugar haciendo entreg2. formal del edificio y todos sus efectos al presbítero D. José Vega que noti::i– caba a las autoridades que el 8 de abril se hacía cargo de este Real San– tuario y de todas sus dependenci~s. Este sacerdote realizó muchas obras que merecieron el elogio de sus su pe– riores ya que supo "conservar y mejonr el edificio y santuario, ha celebrado muchas funciones religiosas con la mayor solemnidad y no contento con esto propuso a S. M. y obtuvo su Re.al autorización para establecer una Aca– demia de Música a cargo de un profe– sor, para los muchachos hijos de pobres jornaleros y empleados de corto haber; teniendo hoy unos vei::1- 52 ticu2-tro de ellos que ya se muestran algo adelantados, unos en el canto y otros en el órgano, estimulándolos para celebración de funciones religio~ sas y formando insensiblemente el corazón de estos jóvenes a los cuales dirige con los más cristianos ejemplos y saludables máximas, habiendo logra– do captarse de todos ellos el más res– petuoso cariño, como sucede con cuantos tienen el gusto de tratarle y adm~rar su incansable celo, su humildad cristiana y su desprendimiento y abne– gación de todo interés personal" < 63 )_ A pesar de su reconocido éxito, D. José Vega tiene que ceder el edifi– cio al P. Carrión, obispo de Puerto Rico a quien se pide que "explanara y fijara el plan del lnstitu to ... y los me– dios morales y materiales que cuenta" < 63 ) y obtenido el beneplácito de la Carena recibe el acta de entrega por el "que SS.MM . ceden temporalmente el referido edificio y Santuario... y cuantos enseres y útiles eran necesa– rios para establecer doce religiosos que creyó conveniente para el culto de la Sagrada Imagen" < 63 )_ Los nuevos inquilinos gozaron poco tiem:Jo de su estancia. La revolución de 1868, dejó de nuevo el edificio abandonado, aunque conocemos que el gobierno puso una persona con su sueldo pertinente para mantener y con– servar el edificio y, en lo que pudiera, el culto a la Imagen.