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-44- •Apólogeticum» (o •Apologeticus » se. «liber »), dedicado a los prefectos de las provincias del imperio romano. Separán– dose de la forma usual de las apologías anteriores, trata ex– clusivamente de las acusaciones políticas dirigidas contra los cristianos, especialmente las de desprecio de lus dioses y de lesa majestad imperial. Combate con singular destreza y ha– bilidad la forma peculiar con que el Estado pagano apU-ca la justicia a los cristianos; a todos los culpables se les permite la defensa, menos a los cristianos; a los demás se procura con los tormentos arrancarles una confe.;ión, pero a los cristianos una negación. •El cristianismo », se dice al fin del libro, « es un sistema fitofófico; pero a los filósofos geníiles no se les obliga a sacrificar, y puec:cn tiibremente y sin ser molestados, negar a los dioses. A pesar de esto, la crueldad de lus genti– les no perjudica a la difusión del cristianismo, antes bien: ._¿,,Piures efficimur, quot1ens metimur, semen est sanguis chris– tianorum • (c. 50).-b) Los dos libros , Ad nationes •, una espe– cie de apología de indo e general, dirigida al pueblo pagano. - c) «De testimonio animae , , donde amplía la frase del Apo– logético (c. 17): O testimonium animae naturalifer christianae,· los gentiles en sus exclamaciones y locuciones de costumbre dan a entender que en el fondo de su alma creen en la uni– dad de Dios, en la inmortalidad del alma, y en la existencia de espíritus malignos, por ej., cuando dicen: •Dios lo sabe », o también: «¡Descanse en paz! »- d) «De idalatria », en el cual se prohibe a los cristianos acept -u el ca,go de maestros de es– cuela entre los paganos, y prestar con ellos el servicio militar, del mismo modo que en el e) «De spectaculis » se prohibe asistir a los expectáculos del teatro y del circo. 5. 0 Entre las obras dogmático-polémicas y'aun entre todas las de tertufümoo, lleva la palma la De prcesc, iptione hceretico– rum, escrita por el añe 200. La palabra ¡z_rces __ aipfio_en sentido jurídico significa generalmente el acto de concluirse o extin– guirse una carga, obligación o deuda por el transcurso de cierto espacio de tiempo; pero Tertuliano la toma en el senti– mido de e~ción al proceso, o sea una .12rotesta contra la persona del acusador, de la cual se sigue como consecuencia que su acusación queda sin más ni más rechazada. Según Ter– tuliano pueden hacerse tres excepciones contra los herejes: 1.ª praescríptio veritatis: únicamente el testimonio de la Igle– sia apostólica, de ningún modo el de los herejes, puede ser admitido para probar la verdad de la religión cristiana y la

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