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un _yalor puramente transitorio; la segunda (c. 48-108) prue'"' ba que la adoración ·de esús no contradice al monoteísmo; la tercera (c. 109-142) demuestra que también los paganos son llamados a entrar en la Iglesia de Cristo. 5. Eusebio (Hist. eccl. IV, 18) testifica que Justino escri– bió también las tres obras siguientes: •Üratio ad Gra~cos», «Cohortatio ad ·Gra~cos», y «De monarchia», o sea, de la uni– dad de Dios. Efectivamente, tres son las obras que, con estos tres títulos y bajo el nombre de Justino, nos han sido transmi– tidas en los manuscritos; pero hoy día comúnmente se niega que sean suyas, entre otras .razones por la diversidad de esti– lo. La breve «Oratio ad Grcecos » y la obra «De monarchia, pertenecen probablemente al siglo 11; aquélla demuestra la sinrazón de la mitología pagana; ésta trata de poner de mani– fiesto la unidad de Dios con citas, generalmente falsas, de los poetas paganos (1 ). La ,, Cohortatio». fué calcada verosímil– mente sobre la « Cronografía» de Julio Africano, escrita el 221, y pertenece quizás a la segunda mitad del siglo III (2); en ella se demuestra que los sabios griegos se contradicen muchas veces, y que las verdades que presentan las tomaron de los libros judíos. 6. Jústino escribe según la impresión del !nomento, y no tiene reparo alguno en separarse del objeto que trata y entre– tenerse en materias ajenas, dando así lugar a desmembracio– nes y repeticiones. El intento de Wehofer, de probar que su · apología era un discurso artístico según las reglas de la anti– gua retórica, no ha merecido la aprobación de nadie. Justino se. complace además en los períodos ampulosos, con gran copia de participios, siendo su expresión lánguida, y su expo– sición no tiene sino muy raras veces el calor e impulso de la verdadera inspiración. Pero sus escritos son de gran valor por la substancia de su contenido, no tanto desde el P!,lnto de (1) A nuest10 juicio, la autencidad de la obra •De monarchia" no es más que probable, a pesat de !o que dicen Eusébio, Hist. eccl IV. 18, y Elte.1, De lustini monarchia et A'ristobulo lud1eo, Bonner Progr. 1894. (2} Así la afirma hoy, con Schürer (Zeitschr. für Kirchengeschichte lI ( 1877 - 1878 ), y Puech ( Mélanges Hénri Wcil ( 1898) p. 402), Harnack después de concit:nzudas investigaciones (Die Chrono!..gk II. 151 y sgs. 545 y sgs.) Oaul (Die Abfassungsve1halt11isse der pseudo justini,chen •C,horta– tioa d Grmc •s., Berlín 1902) pone la publicación de este escrito a principios de[siglolll: Wütmann (Die Echtheit der Mahnrede Justins des Martyres, Ma.– guncia 1902) califica esta nbra de "propiamente y en alto grado justiniano•. Véase también a Krüger en , Gott. Gel. Anz., 1905·, p. 20 y sgs. . ..