BCCCAP00000000000000000001369
- 100 - 7. De mucho más valor que los comentarios son los es– critos históricos de San Jerónimo; de los más celebrados de éstos, titulados «De viris illustribus» y «Crónica • , hemos ha– blado ya. Escribió también las vidas de monjes célebres, como Pablo de Tebas, Maleo del desiérto de Calcis, Hilarión de Palestina. Acerca del «Martyrologium Hieronymianum • , que no pertenece a Jerónimo. Antiguamente no se conocía ningún sermón de Jerónimo, pero en estos últimos tiempos el infatigable Morin ha descu– bierto y publicado (1) 59 tratados del santo anacoreta, que andaban entre los escritos de Crisóstomo, Agustín y otros. El mismo editor publicó en 1903 otros 14-• Tractatus in Psal– mos» (2), y son todos ellos discursos que pronunció el $anto ante una comunidad de monjes, los cuales transcribieron los oyentes. Sus escritos dogmdticos, todos de carácter polémico, son los siguientes: •Altercatio Luciferiani et orthodoxi • , un diálo– go entre un sectario del cismático obispo Lucifer de Cálaris y un ortodoxo; •Adversus Helvidium, de perpetua virginitate B. Marice»; Helvidio afirmaba que: María había tenido comer– cio conyugal con José después del nacimiento del Niño Jesús; dos libros «Adversus Iovinianum • , el cual enseñaba que el estado de continencia no tiene ventaja alguna sobre el estado de matrimonio; que los bautizados no podían pecar; que el ayuno no tenía ningún valor, y que el premio de la otra vida sería igual para todos; «Contra Vigilantium • , el cual impug– naba el culto que la Iglesia tributa a los Santos, la pobreza voluntaria de los monjes y el celibato de los clérigos. La obra «Contra loannem Hierosoiymitanum • y los tres libios «Adver– sus libros Rufini • , están llenos de acusaciones personales. Los tres libros • Dialogus contra Pelagianos • , no fueron escritos hasta el año 415. La obra de Dídimo el Ciego, De Spiritu Sancto », se conservó en la traducción latina de Jerónimo. Hace poco publicó Morin (3) un símbolo muy interesante, atribuído a Jerónimo. · Ya en la Edad Media fueron muy estimadas las cartas de Jerónimo; éstas son 120 distribuídas por todo el tiempo de su (!) S. Hleronymi presbyteri , ractatus, sive homilire in Psalmos, Marci Evangehum aliaque varia argumenta (Anécdota Maredsolana lll, 2), Mared– sol. lb97. (2J Anecdota Maredsolana, Ill, 3. (.:S) Rtvue Bénéd!ctlne 1904. enero, p. 1-9,
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz