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Pienso que el oficio de superior hoy día es más difícil que en otros tiempos. Bromeo alguna vez en mi comunidad, diciendo que me gustaría vivir en aquellos momentos "gloriosos" de la disciplina, donde se podía decir a un súbdito: "¡Tú!... por desobediente, ¡besa los pies a toda la comunidad!". Pero hoy, estamos, casi por desgracia para esto, en otra época... ¡qué le vamos a hacer! Si en una casa de nuestra Provincia no quieren los demás hacer una cosa, ya se sabe a quien el toca. Por eso no es raro el ver a los superiores capuchinos de porteros, de cocineros, "diciendo" misas a mansalva, "porque... ¡es que no hay nadie!". Y luego echas la cuenta a la hora de comer y sí que había más. Quizás exagero un poco... O tal vez... ¡no exagero nada, incluso me quedo corto! Veo bien la independencia, no añoro las dictaduras, aunque me repugna el pensamiento democratero para todo. Ya se sabe, como me decía un formador, que "si el que tiene que mandar no manda, al final manda el que no tiene que mandar. .. " En la terminología franciscana, y según recogen nuestra Constitucio– nes capuchinas, los superiores son "los ministros y siervos de la Frater– nidad". Son los servidores por excelencia. Sin embargo, es distinto ser "ministro y siervo de la Fraternidad" con el apoyo y comprensión de los demás o sin ellos. Sin esa colaboración es muy difícil que se pueda trabajar bien. Para la mayoría de los hermanos esto de ser superior no es un plato agradable. Nuestra debilidad hace que rechacemos tales oficios. Existen muchos hermanos que, como gatos escaldados, huyen de cualquier otro cargo. Es comprensible esa situación cuando estos hermanos se han "quemado" en el servicio frateqio, al haberse quedado solos en la guardianía y haber experimentado en su propia carne lo duro que es eso de que siempre le toca todo al mismo. Si seguimos así, los superiores del futuro serán los jóvenes, gente inexperta que aún no ha pasado por la guardianía, y por ser nuevos, todos pagaremos las novatadas de su inexperiencia. Y hablo de lo que conozco: nunca tanto como ahora la 61

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