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saber preguntar. No tener prejuicios con ningún hermano. También se echa de menos el agradecimiento a los guardianes al terminar su servicio. La celebración de la fe tiene que extenderse a una celebración espiritual, humana y laboral. A veces, esta celebración es sólo exterior, es decir, con la Comunidad cristiana y nos falta tiempo para celebrarla dentro de la fraternidad; por ejemplo: s. Francisco o fa Navidad. Se experimenta cierta dificultad en hablar a los religiosos, lo que se puede cambiar por una lectura apropiada o la invitación a otro religioso, bien de la fraternidad o de fuera de ella. El proyecto comunitario se ha mostrado un medio excelente para la animación de la fraternidad, ya que exige previamente un proceso de maduración y de comunicación difícil de obtener por otros medios. Además, sirve de confrontación con el proyecto personal de cada religioso. No se pueden olvidar los momentos lúdicos o de expansión, donde el religioso se muestra más espontáneo y sin cohibiciones. Finalmente, hay que tener en cuenta que el religioso, incluido el guardián, no debe servirse de la comunidad, sino servirla. 6. ¿Serías capaz de hacer un retrato-robot del "Guardián perfecto"? No es posible, ya que siempre se trata de una persona concreta con su historia, sus intereses, etc. Como aproximación sugerimos: - comprensivo, - humano, - simpático y optimista, - no absorbente, - pacificador, - que sepa dejar hacer. ••••• La sesión de la tarde se inicia a las 4 con el rezo de la Hora intermedia. 41