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Puede ayudar, también, el proporcionarles una actividad adecuada, que los mantenga activos. El entorno nos identifica por lo que hacemos. ¿ De quémanerapuede ser animado aquél hermano que "ya no hace", porque ha quedado reducido a "ser", simplemente? La manía activista es siempre una huida hacia adelante que produce euforia. Pero esto responde a una patología social que prima el "hacer". Para resolver la cuestión, es urgente favorecer todo lo que sirva para potenciar la vida interior del individuo, incluso en los aspectos de regulación del descanso y del intercambio personal. ¿Se puede dar el caso de que en esta huida haya descubierto una nueva ocupación, una nueva ilusión? Ilusionarse significa avanzar hacia algo, mientras que la huida es, siempre, apartarse de algo o de alguien. El síntoma de la situación de "huida" es malestar que se manifiesta cuando se detiene en su actividad. ¿En qué punto se podría situar la fecha de jubilación en nuestras fraternidades? Existe, en la vida religiosa, una ventaja, ya que la mayoría de sus miembros se dedican a una actividad intelectual en la que, a los 60 años, se está en plena productividad. Es por esta razón por la que será necesaria la observación del resto de actividades alternativas y su evolución en ellas, para detectar en qué momento aquellas tareas ya no le satisfacen o no puede llevarlas a cabo. El "ser" religioso no admite jubilación, y eso es una ventaja. El problema estriba en descubrir alternativas para la actividad, no para el "ser". 114