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enseñados en la Iglesia. Se nos asegura que los principios y razonamientos humanos solos no hacen perfecto al ser humano. Y con eso se crea la fe en la dimensión superior de nuestras personas. Humanamente hablando nos defendemos bien, al nivel de todo los seres vivos, Pero nosotros tenemos que aspirar a la pervivencia eterna y eso se llama vivir de principios especiales que nos vienen Arriba. III. Mat. 11, 25-30 Habla Jesús de cómo le impresiona la bondad de su Padre que se revela y revela a Jesús a los que no presumen de sabios y entendidos. Y aceptan la pequeñez de los niños que creen todo lo que le enseñan los maestros. Había y hay muchos que presumen de saberlo todo y de hallar hasta manchas en el sol. Y no se privarían de arrasar bienes y culturas ajenas para instalar su mundo perfecto. Desconocemos la historia cuando presumimos de tener planes para hacer nuevo el mundo. Solo Dios puede decir: "hago nuevas todas las cosas" La novedad es que las cosas adquieren categoría de criaturas suyas, que hay que cuidar. Por eso da tantísima pena ver el afán destructivo y desconsagrante de los que presumen de sabios y entendidos. Asegura Jesús:" Todo me lo ha entregado mi Padre, y hace que me conozcan los que quieran aliviar el cansancio y llevar el yugo de las obligaciones". Porque Jesús se califica de manso y humilde de corazón. Y asegura que las obligaciones que propone son ligeras, porque no exceden el sentido común. Solo hay que bautizarlas. Y eso ya crea responsabilidad en nosotros: cada día rebautizar las intenciones de nuestros actos, cada día ponerse en contacto con Jesús para trabajar 87

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