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artísticos y también imaginativos forma literaria, imaginaria y religiosa. Hay en el lenguaje de Jesús expresiones terribles, como que el que niegue su divinidad y a Dios creador peca contra el Espíritu y sale del camino de la salvación. Cuando veo a un vociferante negar a Dios el derecho a existir y en su pequeñez proclama su negativa radical a aceptar los derechos de otros a pensar libremente en todo, está claro que está pasando aquella etapa de guerra, cuando la lucha contra Dios era estandarte moderno. Todos pasamos momentos o tiempos en que nos imaginamos que Dios nos estorba. Suponer que esa lucha se argumenta con que los creyentes han abusado, o son ignorantes y fanáticos es señal de una soberbia de quien cree que tiene capacidad inmensa y carece de un fundamente razonable para ser positivo. De diez personas que luchan, nueve, atacan y una piensa. No olvidemos que el fanático, se siente dios no menor. Y eso que sabe que no puede crear nada divino. Y casi nada humano de verdadero valor universal. II. Filem. 9b-10. 12-27 La esclavitud tiene muchas caras. Las más conocida y escandalosa es la corporal. Pero la más terrible es la que encadena el alma, el pensamiento, las creencias. Solo hace 150 años que se condena absolutamente la esclavitud. Pero en estos nuestros años hay millones esclavizados por capitalistas y por dictadores. Estos te dicen: o lo tomas o lo dejas. A pesar de los enormes adelantos esto se mantiene. La ley de oferta y demanda, que parece consustancial al ser humano, es una esclavitud remunerada con poca generosidad, en general. Podríamos decir que la esclavitud es compañera inseparable del progreso, porque cada aula recibe 369

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