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destinada a vivir para los demás. De sus palabras salen buenos consejos y avisos. Y también excesos verbales. Pero eso es otra cuestión. Porque jamás cumpliremos del todo lo que anhelamos. Pero los deseos son inmensos. Y debemos renovar la oferta en cada acto de culto. Cuando se sepa que la Jerusalén-Iglesia de este mundo está sostenida mayormente por las obras y palabras de Uds. se vivirá una enorme verdad. La famosa igualdad, en cuanto es posible, se da en la Iglesia. Lo que pasa es que muchas creen que solo son de verdad valiosas si suben a las esferas más altas de los ministerios. Llegará o no esa hora, la que sí ha llegado es el que las obras y Palabras que Jesús encarga a los discípulos, complementarios de los Apóstoles, nos las pide en esta ocasión. Pues vamos a responderle que se lo creemos.. CREO EN DIOS. *** Domingo 15 C ordinario.11 de Julio de 2010 I. Deuter.30, 10-14 Un signo de los tiempos es el haber prescindido en la catequesis de la memorización de Mandamientos, Sacramentos, Virtudes y Bienaventuranzas. Es como pretender edificar sobre arena o tierra un edificio que queremos habitar con seguridad toda la vida. Apelamos al llamamiento de la conciencia, y está muy bien, pues la conciencia es el yo auténtico. Mas la conciencia tiene LA terminación CIENCIA que indica algo: nada se sabe ni se siente sin haberlo aprendido. Levantar un edificio sin nociones de cálculo y dibujo es una temeridad. Ahora bien: también ha cundido la idea de que lo que enseña un maestro es discutible. Y por eso hay tanto 344