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contradicción entre la libertad de un romano y la de un judío. Cosa que se podía resolver aceptando la hermandad cristiana que brota de un signo poderoso que es el Bautismo. Jesús había dicho que la verdad hace libres. Y Pablo se apoya en Cristo para definir su verdad. Porque Cristo trabajó mucho y descubrió que es más libre el pobre, el misericordioso, el pacífico, el que lucha por la justicia, que el rico que solo pensaba en aumentar lagares y depósitos. Y Jesús si sintió miedo al concepto de libertad que le ofrecía Satán: dominar el mundo si le adoraba de rodillas. Esa libertad aún se predica. La proclamación de la verdad desde el poder es de sumo peligro. Ya el Poder es término peligroso. Quien tiene el Poder total, no por elección, es rico hasta el extremo de disponer de las libertades de los demás III. Luc. 9, 51-62 Jesús y los suyos acaban de ser rechazados en un pueblo de samaritanos. Iban hacia Jerusalén, donde los samaritanos tampoco eran recibidos por estar manchados de herejía contra el Templo. Tenían su propio templo, como tenían su propia colección de los libros de Moisés, tal como sucede hoy. Es probable que ignoraran la buena opinión que tuvo de ellos Jesús, y cómo los ejemplos más hermosos de sus parábolas se basan en personas samaritanas. El agua viva que salta hasta la vida eterna, fue ofrecida por la mujer y reciclada hasta lo divino por Jesús. "Dame de esa agua para que nunca más tenga sed". El que atiende al abandonado y mal mirado por sacerdote y levita, era un samaritano. Zaqueo, cobrador de impuestos, y capturado por las atenciones de Jesús era samaritano. 340