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María santísima, allá ellos. También hay millones de hijos que orillan a sus madres y no les va mal. En último término cada uno va a ser juzgado según su proceder, y no podrá escudarse en las negaciones ajenas. Por eso en este instante acude a nosotros la palabra CREO y la proclamamos: Creo en Dios Padre .... *** Domingo de Epifanía. León 2013 I. Isa. 60, 1-6 Oída la primera lectura uno se siente visitado por infinidad de gentes de todo el mundo, que traen oro e incienso y múltiples tesoros a la Jerusalén más universal que es la Iglesia de Cristo, que tiene diversas caras o nombres. El origen de los regalos están señalados para el sur oriental Efá, Madián y Saba. Pero los portadores parece que debían de venir de Babilonia, centro especial de ciencia celeste. Fue en Babilonia donde se recopilaron las profecías entre ellas la de Balán, que auguraba el ascenso de la Estrella de Israel. Este pueblo de Dios estuvo dispersado por los imperios del Éufrates y del Tigris, y allí se originaron las sinagogas, ya que el templo de Jerusalén estaba derruido y en lejanísimas tierras. Como dondequiera que hay judíos se hace famoso su culto sabático y bíblico, es seguro que en aquellos lugares hubiera curiosos, estudiosos y prosélitos. No dice Mateo que llegaran a Jerusalén en Camellos, pero lo dijo el profeta Isaías. Además era el transporte más seguro El Papa asegura que el episodio de los Magos es historia real, y cumple las profecías. 274