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tienen la fe del carbonero. Las gentes crédulas pasan por disminuidos mentales. Y las incrédulas deberían tener ese mismo calificativo. La fe en Jesús resucitado ¿es para crédulos e indocumentados, o es para quienes tienen necesidad de la Verdad de Cristo? Este es el asunto. Creer en Jesús resucitado es el mayor Don del Padre. Y nunca daremos suficientes gracias por tener esa base indestructible de nuestra Verdad Cristiana. Lo confesamos con todo entusiasmo: Creo en Dios Padre *** Domingo III B, de Pascua. 26. 4- 009. El misterio del Mal: cómo se sale de él. I. Hechos, 3, 13-15. 17-19. Toda creencia se basa en un gran anuncio. Vivimos de anuncios para cualquier cosa... Incluso para superar los misterios de la maldad. En este asunto aparece un gran Curador, llamado Jesús de Nazaret. Para considerarlo el gran Curador, debe él mismo haber superado el mal que se le vino encima. Y por eso Jesús se presenta como el Resucitado, El pudo con todos los males gracias a haberlos padecido. ¿Tanto urge el encontrar Liberación del misterioso Mal? Así es. Porque el Mal, con el nombre de Pecado, atrapa a todo el mundo y nadie puede sentirse libre y del todo concorde con Dios y con la sociedad. Por eso llaman tanto la atención los Curadores o Sanadores. II 1ª Juan 2, 1-5ª. Jesús resucitado se apresura a unir el saludo de Paz a vosotros, con la oferta del Perdón de los pecados. Y 183