BCCCAP00000000000000000001351

cumplimiento la palabra de Cristo, cuando nos aj vierte: «Procurad estar preparados, porque a la hora que menos lo penséis, vendrá el Hijo del Hombre». Y ahora atiende bien a lo que te voy a deci-, Juanito, para que tú lo repitas por activa y por pa– siva, a tiempo y a destiempo, a los de arriba y a los de abajo. Te lo digo a tí, pero mi deseo sería que lo oyeran hasta los sordos. Es esto: dejar la conversión, dejar el acto de perfecta contrición, dejar a veces también la con– fesión para mañana y, sobre todo, para la hora de la muerte, es la mayor y la más deplorable de todas las insensateces que puede cometer el hombre... - ¿ Y qué hacer, si se presenta el momento decisivo y uno no se ha preparado antes? - Esto es a lo que vamos a responder, Dios mediante, en nuestra charla de mañana. Charla a la que vamos a llamar dominical, puesto que va a ser la séptima y última, es decir, la correspondien:e al séptimo y último día de la semana. Así es que hasta mañana, si Dios quiere, Jua– nito. - Hasta mañana, don Antonio. 89

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz