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una sum1s10n humJldemente callada, puso su conocimiento humano sobre la incomprensibili– dad de los divinos careanb&, -Por ,eso su n,egativa · no , s¡lgnUiicaba unia ü1.snrrece'ión ouaJguli.e,ra contra Dios, era uña denegación fundamental de, lo ·sobr,enatural, de la• elevación a la gloria divina. ¡Le t,istaba su gloria :puramente hu.. mana! Una orgu¡losa ,desobedi,encia fué realmente la esencia del primer pecado ,con sus tristes conse– cuencias para toda ·la ,humanidad.' b) ¡por esto, .según ,eldé'Cre.to divino de la sal– vación, la redención de Cristo debía ,consistir también ,en .. Jlumilde obediencia. Al mandamien– to dado a J\dánen otro.tiempo, Dios contrapuso el.mandatode la.cruz daidoásaHijo. Es sigui,, ficativoque:elSalvador:.r,~petic!tas;.yeces.:lo. llama sencillamente «iel. mandato~•·que .. él,ha r:ecibido d;el Padre .. {Jn.,.10,.·l8;,.'i:4, ;31). Como elmandato de1(Haraí.so,•también ,e1,man– dato de la cruz se f.Undaba únicamente ,en la libre autoridad. ,del d.,ecreto1.cte Dios soberano sobr,e .. Ja criatura humana: ,Obj;etiva .· y ,humana– mente .visto, ,1:;:s asimismo oscuró, incomprensifüe. Hasta ,el mismo ,Apóstol habla francamente de la ilncura de J.a_,cruz <(I Cor., 1, 18, 23), Como en'.otro tiempo, tatnbién,ahora de nuevo el destino .. del género humano 0 idebia d-epender de la sumisión ~e .unQ_.sorlo..at mj.soo:rdo. d:el. Dios soberano, Y Cristo,..ersegundo,,,Adán, ha cuinp•lido esta sumisión. ne E'l escribe:ie1 .Apóstol;. «Se humilló; hecho obedienté. •hasta, la• .mu:erte, .y• muerte dé cruz» (Filp., 2, . .S)v Su .. lium1lde cons•entirniérito r,eparó la negativ.a ·de .Adán,. nos redimió· de sus funestas ,consecuencias y de nuevo y para• •siem-' - .253 -