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;Madre ideal. Con María, la mejor Madre, se stenten fuera de peligro en su necesidad y d.e-, bilidad; . . • , b) ¿P,odremos entonces nosotros saoerdotes y ,ca,puchinos tener menos confianza en su ,bon– dad maternal? ,$e trata ,de -la r,eali2:ación en nosotros de su· propio ideal. de castidad, de..Ia fidelidad como de una ,esposa ;para con Cristo, su Hijo, de la .. fe– cun:dldap. de nue.stro apostolado franciscano. In-. teresa .que, ,en ver,dad, .(María, vaya sobre ..todo, La inmen¡sa legión .francis;eana atestigua, desde los dias de nuestro lF'i;l¡df'e hl;l,sta la hora pr,e– sente, ,que en Ja lucha, por la castidad a, Hµ,s prometida ha•· experinÍ,entado manifiestamente la bondadosa ay:uq:a maternal de J,a Mañre ;ee,- lestial. · APLICACIÓN.-,De continuo se nos muestra que el amor francisca;io tradicional y especialmP,nté tierno a ;Maria no es nad¡:i, ,casual, sino una he– rencia fundame;qial .Conservémosla con santa fidelidad. Levantemos los ojos diariamente, so– bre todo ,en las horas de tentación y peligro, cc;in confianza a la 'Purísima Virgen y bondadq,ífüma Madre. «Bitmaventurada Madre :Y· Virgen:tntac,– ta, intercede en nuestro favor ante el. Señor~,, . ;E>ETLCIONES. «En tu amplio manto, María, danos refugio y defensa, déjanos bajo su a;brigo mi,entras la tormenta rueda. Protégenos sin, descanso, · oh Madre de. bondad llena: Cuando. el enemigo se una y airado nos acometa, - 226 -