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de Dios con sus 'profundos misterios por medio de aoertadas imágenes y comparaciones toma– das precisamente de la naturaleza y de la vida de su tierra p.alestinense. Así, •en ,el Evangelio (Mt., 13, 24-30) de este día le· oímos d,ecir a la muchedumbr,e: «Es semejante el reino de los cieJos a uµ _h9mbre que ~mbró en su campo sémil1a !büeria.: Pero:·:·ihiexftr'ás iá: · ·gente tlórmía~ vino el ,enemigo ry sembró cizañ.a ,entre el trigo y se fué. cuando creció la hierba y d\ó fruto, en– tone-es apareció la ei~~ña. A;cereándose los cria– dos al amo le dijeron: ·señor, ¿no has sembrado semijla, buen~ en tu ·campo? ,¿De ,d.ónde viene, pü(;½t· que h~:y~;ci~aíi¡t? :Y (}~-- l~~ ,cqntestq: Eso ~ obl'.,a .de un e:p.emig()_> ((11.It., J3, ~4-2cB).. EJ' Salvador se:_refiiere-en éstaparábola-a·uno, de esos actos de odici o de venganza, tan freéuen– tes ·en ·Oi'l,en'te' que aun _1~: ·1egi~lae1ón -•romana se oéipó de. ellos\< u,ii. propteifoí'rio ha ~mbrado · sü. campo de trigo, .pe,ró' _ppr'lá noche· va allí. su . enemigo y sieí:n'bra cizaña en el mismo campo. Precisamente es t¡m .tlpica-,, esta mala hierba, sobre todo cuando «éreée 'e'r fallo y. da fruto>, e!3to 1 es, al tie~l)O .d~Ja, ~9ffiH!,gió.Il-. 4e 1 1~ e~~~fl., que,f~n- ~f~eF,?,O ~e .qi~tl.J1g:ue, ~l t,;JiP.L:ni~enti:a~_: que ~t~s ~:penas- ,esto e,'MWaj;\>Je .~uµJt 1~ Yl*t ej,ercitada, 49~- , c.ri~ ,05, ;qu:e ,,:p~rt~~\µii¡¡on. ~n Ja si,embra sabeil- que, ~i~,~~~-;~ -~ e:rnp1~6 s)- . .:qu~te buena,-f:,bten li;o;ipia;.:,Sabe:q ~mbién qu:e !:):Q. afíq.s ,anter)(?res el_. c~pó pq¿;Jl·~vó ,ningu;i_a cizaña. o . al meño1:1 ,en t~l a.buna1¡1¡ntj~•. Por.• eso su asombrada pregunta:,,' «¿De dónde esta ci- zaña?~ c:E~ ,pr9pie~~rio,, n<>, i 1 gnora ~o _qi.ie saben 1~ criados, pero además él re.cuerda lo que a e}lQB •qui~á,·es. menps,cppoeido, a sai.'ber, que tien,e un enemigo que trata de ~a,cflrle daño de toda,s - 184-,-