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· la tierra )lumedecidá, Ta átmpsfera saturada y · el agua· d~ los innumerables charcos,,forman,\al v;tporizatse, otra$ y otras,cottin~i; de nlib(!s/que· él.soldes,vanece ámedida que se vanforinaudó,y q11e vuelve á formar.según se van <}.esv~necieri– do, hasfa que limpia la tierra y secados los charco~ y.la atmósfera, puede él enviar sin obs– táculói;¡ su luz, y brillar~on toda su hermosura, · en:medio del~ancho_firmamento. Ahí- tenéis,. séñores, eJ fenómeno histórico que· se observa en la religión católica: La perfección sol:>re.humana <l~ si¡s docfrinél!;! tropieza con fre– ·cuencia co1;1 las debilidades y pasiones del hom– br~;, delc:lióqÚé resultanespesas polvaredas, que_ , llegan á enturbiar la belle.za y sublimidad de , la obra divina; pero,. al sobrevenir la calma, se van disipando.y desapareciendo, como. se disipa– ron la_squelevantó la ignorancia de fos primeros siglos Ele la Eda.d Media, y las que suscitó el cisma. de Occidente, y las que'trataron de formar -el protestantismo y el jaÍlsenirsmo, .p.ud) .end0 aqué 0 • ·ua salir .triunfante en :el desb'or<farrÜéÚto~gene– -ral de pasiones que acompañó á la Revolüción_ Jtancesa. II~y una leyenda ár1¡1,be, según"'la eual las,fa– . mosas, pirámides de Egipto fUEl'l'Ón 1evanfa<ias ,,, . . ~ . . ' . , . por JUl rey antediltiviano.,. Cuando soi:fre'v:ino la .in:rriensa · inundación, quedaron -,sepllltM:as l-a-s ciudades,~lqs.edificios más su9tuo,sos, J.ai 'tierraé, . los bosques y los accidentes todos del terreno, ~/>lamente una de ellas, la mayor, quedó con su