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115 - tó.dco nos ha dejado; delante de lá ff ra.n~fifJ14?~a .. ción, d~ Rafael, por ejemplo, y cua,ndo ha.yáls ~taminado la no blez¡:¡, ~e las fig,ur::ts, }ll, deHe:a:- ·· .deza de los contornos, los sorprendente$ efeC,tos de su luz y de su .colorido, para el éual parece ,que el artista ha robado los colores al niisllio sol, y tengáis el espír::tu eompleta,ment~ pE;Jne– trado por la sublimidad estética; que encierra .el · lienzo, .trasladad vuestra mirada y dirigidla .á alguna. copia ejeéutad1;,, por un medi&n.o pintor; -el marco ._s'e parecerá.; el colorido conservará., más 6 -menos, lejanas reminiscencias del. origi– nal, y lo· propio sucederá con los contornos, y -OOll todos los 'detalle$ que presentaba el cuadro <lel maestro; pero ¿q_uién, señores; será tan pro– ·fano en el arte, que no comprenda que hay algo. trascendental, incopia 0 ble, en la obra dél genio, qu'e no serán 'capaces de reproducir los demás, .aun cuando en ello pongan todos los empeños <le su voluntad y todas las habilidades de su ta-. Jonto? (1) Esto-mismo· cabe decir de 1a·religión. ctistia- 1na, en la cual han venido á concentrarse, como -en un inmenso foco, todos los_ rayos de verdad ireligiosa m:¡parcido¡:¡ .á través del espacio y del tiempo: semejante á las otras religiones, desde .ciertos puntos de vista, es, sin embargo de otra (1) 1:léligion et critique, parl' abM de BrJg!ir, 6Jít. par Piat,'pág,, 86.