En "Los Hechos de los Apóstoles", tenemos la vida edificante de los primeros cris– tianos, con sus ejemplos de la más pura fraternidad. Hech 2,42-47. Nos habla San Pablo de los deberes de los hijos y de los padres, de la autoridJd: Ef 6,1-6. En Gálatas se nos previene contra la distinción racial. "No hay Judío ni griego. .." Gl 3,28. Sobre el problema social, son de sumo interés los principios del Apóstol: "Haya equidad". "Siendo muchos somos un solo cuerpo en Cristo, pero cada miembro está al servicio de los otros miembros..." "Sea vuestra vida exenta de avaricia..." 2 Co 8,11-15; 9,6-14 Rm 12,4-21 J-feb 13,5-6. En la Epístola a los Colosenses, se afirma implícitamente que el esclavo es igual que el libre, pues ambos fueron igualmente redimidos por la sangre de Cristo. Cl 3,11. INFLUENCIA DE LA BIBLIA EN LA TEOLOGIA Y EN LA LITURGIA La Teología fundamenta sus verdades en la Biblia. En la primitiva Iglesia, la ciencia teológica era la propia Escritura, como de ello dan testimonio San Ireneo, San Ata– nasia, San Agustín, San Jerónimo. Véase: Vat. II "Dei Verbum" no-24. La Biblia es el fundamento de la Liturgia, ya que el misal es fundamentalmente una selección de textos escriturísticos. La Biblia contiene todos los sentimientos del hombre frente a Dios, como lo atesti– guan los Salmos. Una corroboración de la importancia de la Biblia en la Liturgia, la t!)nemos en la Constitución sobre la Sagrada Liturgia del Concilio Vaticano 11.No. 24. CAPITULO V LA INSPIRACION Por la inspiración los libros de la Biblia, se diferencian de todos los libros escritos por los hombres. NATURALEZA DE LA INSPIRACION. La inspiración es una acción del Espíritu Santo sobre el autor sagrado, en virtud de la cual Dios es quien escribe el Libro, juntamente con el autor humano. Por este motivo, repetimos, no hay libro tan im– portante como la Biblia. 16

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz