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52 PRESENCIA ANTIGUA (1598-1835) Desengañado del mundo, entró en la Orden capuchina el 26 de julio de 1637, tomando el hábito pobre y austero en el convento de Tarazana. Gracias a su prestigio social y a su espíritu apostólico comiguió romper todos los obstáculos para ir a evangelizar otros mundos. Fl:.e el fundador de las Misiones de los capuchinos españoles, primeramente en África y luego en América. Murió con fama de santidad a los 54 años de edad, después de 14 años de vida religiosa. Con el influjo de Fray Francisco de Pamplona se organizó la primera expedición de capuchinos misioneros a África, concretamente al Congo. Esta expedición salió de Sanlúcar de Barrameda, el 4 de febrero de 1645. La formaban cinco capuchinos italianos y siete españoles, entre ellos iban tres de esta Provincia Capuchina de Aragón: Miguel de Sesa, J eró– nimo de La Puebla y Francisco de Pamplona. Más tarde, en otras expe– diciones, también se embarcaron otros capuchinos aragoneses como Antonio de Teruel, Tomás Gregario de Huesca, Felipe de Hijar, Gaspar de Sos, etc. Una de las mayores dificultades de los misioneros era la lengua. Para facilitar su aprendizaje y el apostolado en este mundo africano, hay que resaltar la labor realizada por el P. Antonio de Teruel que escribió varios libros de sermones, oraciones y catecismo en la lengua del país, y redactó un nuevo vocabulario en cuatro lenguas: ktín, italiano, español y congolés. 0 4l Pero dejando sin mayores explicaciones esta misión :::apuchina en África, donde más trabajaron los capuchinos aragoneses fue en América, concretamente en la misión de Cumaná (Venezuela). Una vez más, la diplomacia de Fray Francisco de P::i.mplona y la amistad que le unía al rey Felipe IV, lograron vencer todas las resisten– cias y oposiciones, y por fin se abrieron las puertas para ir a evangelizar a América. El 10 de enero de 1647 Felipe IV concedió una Real Cédula autori– zando a Fray Francisco el poder ir con cuatro religiosos más de su Orden a evangelizar a los indígenas del Darién (Panamá). Más tarde llegaron otros permisos. El 1 de abril de 1650 se le concedía poder embarcarse con tres religiosos, rumbo a la isla de Granada y dedicarse en ella a la evan– gelización de sus habitantes.0 5 l En este primer viaje, a Fray Francisco de Pamplona le ::i.compañaban los capuchinos aragoneses P. Lorenzo de Magallón y el P. Antonio de Monegrillo. Al llegar a la ciudad americana de Granada, fueron expul– sados por los franceses, y se dirigieron a la isla de Margarita. Allí se (l 4 ) A. GONZALEZ, «Los capuchinos en la península ibérica», o.e. págs. 321-332. (lS) La cédula va fechada el 1 de abril de 1650. (Archivo General de Indias, Saeto Domingo, 641).