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218 PRESENCIA NUEVA (1929-1998) Después de varias reuniones entre los Superiores ca;:mchinos y las autoridades religiosas diocesanas, se tomó la decisión de tomar la parro– quia, quedando siempre a salvo los fines específicos del postulantado. Convenio entre el Arzobispado y la Orden. El 20 de septiembre de 1991 el Arzobispo de Zaragoza, D. Elías Yanes, y el Superior provincial de los capuchinos, P. Miguel M.ª Andueza, firmaron un "convenio" por el que el Sr. Arzobispo eno:Jmendaba a la Provincia Capuchina de Navarra-Cantabria y Aragén la atención pastoral de la Parroquia de Ntra. Sra. de Lourdes. He aquí algunos puntos más importantes de dicho cor:venio: - "La Parroquia de Ntra. Sra. de Lourdes de Zaragoza, legdmamente erigida por Decreto del 12 de octubre de 1961 tiene personalidad jurídica de propio derecho, distinta, por tanto, de la que corresponde a la casa de la comu– nidad religiosa erigida canónicamente. - "El templo parroquial, locales y viviendas parroquiales cuya descripción figura documentalmente, pertenecen a la parroquia y estarán al servicio del culto y pastoral de la misma. - "La propiedad de los bienes muebles existentes en la igle~-:a y en los locales parroquiales pertenecen a la parroquia. - "En el momento de la firma de este convenio queda ~::rito un religioso– sacerdote, capuchino, miembro de la Provincia de Nawrra-Cantabria y Aragón, como párroco a tiempo pleno y otro como vicario parroquial. - "La remuneración y la Seguridad Social del religioso !Járroco y vicario parroquial dedicados al servicio de la parroquia se regid por las normas diocesanas. - "Antes de que el Instituto Religioso se haga cargo de la parrc;quia, se levantará inventario de los bienes inmuebles y muebles de la misma pe, triplicado, depo– sitándose un ejemplar en el archivo de la Curia Diocesana, otro en la Parro– quia y el tercero en el de la Comunidad religiosa. El invenurio se actualizará periódicamente, siguiendo las directrices diocesanas". < 7) Primer Párroco. Al hablar del servicio parroquial en Valdefierro es lógico recordar a su primer párroco capuchino, el P. Francisco Javier Sagardfa. Desde enero de 1989 ya ejerció como coadjutor, prestando diariameme sus servicios con toda la responsabilidad que siempre le caracterizaba, a pesar de vivir en aquellos meses en la Fraternidad de San Antonio. (7) Idem, o.e., 1992, págs. 30-32.
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