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190 PRESENC,IA NUEVA (1929-1998) ficas como Residencias de Ancianos, transeuntes, Cáritas, Proyecto Hombre, Conferencias de San Vicente de Paul, Franciscanos de la Cruz Blanca, y otras muchas ayudas al Tercer Mundo: Ecu:idor, Filipinas, Médicus Mundi, etc.( 5 J 5. EL MENSAJERO DE SAN ANTONIO. Uno de los grandes medios de formación y evangebación de esta Fraternidad de San Antonio es la revista "El Mensajero de San Antonio" y su "Calendario". Nadie duda de la eficacia y el poder que hoy tienen los medios de comunicación como son la radio, prensa y tdevisión. Y su influjo puede ser formativo o destructivo El fin primordial de la revista "El Mensajero de Sa:i Antonio" es promocionar la vida y la formación religiosa a nivel pop·jJJar. A lo largo de los años se ha caracterizado por tener una lectura facil, agradable, salpicada y enriquecida por anécdotas, pensamientos y me..--isajes. Su lema ha sido siempre "instruir deleitando". El 13 de enero de 1930 hizo su aparición el prirr_er número de "El Mensajero de San Antonio", que llevaba como suhítulo explica– tivo: "Órgano oficial de la capilla de San Antonio del barrio de Venecia". Nació en la antigua capilla del barrio de Torrero come, nacen tantas hojas informativas parroquiales, con humildad y senciLez, y con una tirada de mil ejemplares. Nadie presentía en aquel momento que iba a tener tal éxito a nivel de Aragón y de España, y que incluso llegaría al extranje::o. En noviembre de 1929 se hizo cargo de la direcció:::i de la revista el P. Víctor de Legarda, en cuyo puesto se mantuvo durante 32 años. Al dejar de dirigirla por motivos de enfermedad, la revista había alcanzado la cifra de 65.000 ejemplares mensuales. Sería imperdonable el omitir el nombre de otro capuchino, humilde, alegre, sencillo y sacrificado, Fray Estanislao de Burlada, q .1e dedicó toda su vida a difundir y distribuir personalmente y a domicilio la revista por toda la ciudad de Zaragoza. La revista también contó siempre con un buen equipo de admi– nistración para atender con responsabilidad a los mil~s de suscrip– tores, a pesar de que hasta hace poco no ha habido e::1 sus oficinas medios informáticos. Al P. Víctor le sucedió en la dirección de la revista el?. Martín Sáez de Vicuña que se propuso continuar en la misma línea de su anterior director. La realidad es que el número de suscriptores fue en aumento. ( 5 ) Rev. «El Mensajero de San Antonio», Zaragoza, abril 1997, pág. 117.

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