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LOS CONVENTOS CAPUCHINOS DE ARAGÓN CONVENTO DE ALBALATE DEL ARZOBISPO (TERU EL, 1634 - 1835) 131 Albalate del Arzobispo es una villa de la provincia de Teruel, a 148 km. de la capital. Está situada al pie de la sierra de Arcos, a 342 m. de altitud, regada por el río Martín. Tiene una población de 2. 434 habitantes. Eclesiásticamente per– tenece a la Diócesis de Zaragoza. Es una de las villas bajo aragonesas donde la jota tiene auténtica solera, junto con Alcañiz, Ca landa y Andorra, y el primer pueblo aragonés donde se erigió un monumento a la jota, obra de Ángel Oren– sanz. Del conjunto urbano destacan el castillo episcopal, con bellos ventanales góti– cos, y la iglesia con su torre mudéjar. Además hay que anotar la iglesia de San José y la del Convento de Capuchino; y a 10 km. del pueblo, el Santuario de la Virgen de Arcos, Patrona de la villa. 1. Fundación del convento El año 1634 se llevó a efecto la fundación del convento, según consta en una relación de concordia establecida con el Capítulo de la villa y el P. José de Para– cuellos, Ministro Provincial de la Provincia de Capuchinos de Aragón. Igualmente, el año 1634, el P. José de Paracuellos, Ministro Provincial de Ara– gón, hizo un papel a favor del Capítulo Eclesiástico de la villa en el que se decía que se obligaba a guardar los Capítulos siguientes: -Primero: Que no pueda dar el convento sepultura a ningún Secular. -Segundo: Que no se puedan admitir en el Convento aniversarios, misas per- petuas ni fundadas de las cuales se pueda seguir perjuicio a los Capitulares. -Tercero: Que no se puedan admitir trentenarios, ni número de misas, que se les pueda seguir perjuicio a Vicario y Beneficiados, ni misas de testamento o últi– mas voluntades. -Cuarto: Que en el convento no se puedan celebrar honras, cabos de año, etc. -Quinto: Que no se puedan admitir Cofradías. -Sexto: Que no podamos pedir limosnas en Nuestras Iglesias para misas a las almas, fundaciones de altares, u otras invocaciones; y si dicho Vicario y capitula– res, vinieran con platillo a pedir limosna a nuestra iglesia, día de concurso u otra ocasión, para misas, lo puedan hacer libremente.