BCCCAP00000000000000000001341

y usando parecida expresiones no indican preceptos: 1" « In quamcumque donium intraverint primum dicant: pax huic do– mui » ( c.3, p.67) ; 2° « Fratres illi quibus... laborent fideliter et devote » ( c.5, p.68) ; 3° « Fratres nihil sibi approprient ( pr_ecepto eminente) ... et-tamquam peregrini... vadant pro eleemosyna con– fidenter » (no es precepto) (c.6, p.68); 4° « Et ubicumque sunt... ostendant se domesticos... quia si mater I)..Utrit et diligit... quanto diHgentius débet quis diligere et nutrire ( no es precepto) ... Et si quis eorum... ~lii fratres debent ei servire ( precepto equipo– lente) sicut vellent sibi serviri » ( c.6, p.42) ; 5° « Ipsi vero mini– stri... cum misericordia iniungant illis poenitentiam; si vero pres– byteri non sunt, íniungi / aciant per alios... et pavere debent ne irascantur... » (c.7, p.69s); 6° <{ F_ratres qui sunt ministri... visitent et moneant fratres suos et... corrigant eos ( no es precepto) ... Et ubicumque sunt fratres ... ad suos ministros debeant et possint re– currere ( precepto equipolente). Ministri vero... eos recipiant » (c.10, p.71s); 7° « Ministri vero nullis eundi licentiam tribuant, nisi eis quos viderint... » (c.12, p.74 ). " La mayoría de estas frases tienen la misma fuerza que la contenida en los preceptos equipolentes y con todo no obligan sub mortali, v.gr ., dicant, laborent, vadant, ostendant, iniungant, visitent, corrigant. Es verdad que en los ejemplos mencionados hay ocasiones que parece imposible que el Seráfico Padre pensase en imponer– los bajo pecado mortal; mas también hay otras que pudiera haberlo hecho. Discutióse en el siglo XIII si las cláusulas contenidas en el 1° y 2° eran verdaderos preceptos ( 62 ). Ninguna dificultad en admitir como tal dentro de la mentalidad franciscana la frase 3°. Es curioso que en el 4° el verbo debent indique precepto equipolente y poco antes no, siendo las dos cláusulas expresiones del derecho natural y constituyendo la segunda (el precepto) una consecuencia de la primera. Ni sería extraño .que hubiese mandado sub gravi a los superiores visitar y corregir a los re– ligiosos, cuando en la actualidad así lo impone el canon 511, según opinión de los comentadores. Normas de mucho menor importancia obligan hoy y obligaron en el siglo XIII. Tal vez podría desprenderse de cuanto antecede que la ter– minología de los preceptos equipolentes indica la ausencia de obligaciones graves. Más existen dos casos que obstaculizan Iá conseéuencia. Hablando la .Regla del ayuno dice : « Et ieiunent a festo Omnium Sanctorum usque ad Nativitatem Domini... Sed aliam (62) Cfr., v.gr ., QUATUOR MAGISTRI, Expositio s.uper Regulam Fratrum Minorum, ed. de OLIGER L., Roma 1950, c.3, p.139; c.5, p,149.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz