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praeteritae verba evangelica sunt; hosUa, Regula; lepra, ini– quitas » 05). ¿No parece por todo el contexto que aquí se habla de pecados mortales? Basándose el argumento en una visi.ón puede dudarse mu– cho de su objetividad y eficacia. De hecho, en el lugar paralelo narrado por san Buenaventura con casi. idénticas palabras, el Seráfico Doctor afirma que san Francisco, para animar a sus hijos a la observancia del nuevo programa de vida, les confesaba que él no había puesto nada suyo, sino que lo había hecho escri– bir ta,l como el Se:fior se lo reveló (16 ). El testimonio no responde del todo a la realidad, pues son conocidas las luchas de los mi– nistros por suprimir algunas frases y la influencia de Hugolino en la redacción de la Regla Bulada 07). Aun sin tener en cuenta lo que acabamos de advertir, el par saje en cuestión es muy oscuro. ¿Iniquitas significa en el con– texto pecado mortal? Y, si así fuéra., ¿no lo comete quien despre•• cía cualquier ley justa o descuida en materia importante los tres votos esenciales? 3º Frases enérgicas y actuaciones del Santo. En- cierta ocasión, Pedro Catáneo, a fin de asistir mejor a los numerosos frailes que continuamente llegaban a la Porciún– cula, pidió licencia al Seráfico Padre para recibir algo de los novicios y resolver con más holgura las frecuentes situaciones embarazosas. Rechazó inmediatamente el Fundador tal proposición y dijo: « Absit haec pietas, frater carissime, ut pro quovis homine impie agatur in Regulam >> ( 18 ). El pasaje de la Regla a que aquí se alude obliga hoy sub mortali. La frase que el Santo emplea es enérgica. ¿No se ve en este rigor del Santo en la observancia de la Regla su obligatorie– dad en conciencia? Hase de distinguir con cuidado el cuplimiento de una ley y la obligación que impone. El principio tiene aplicación cla:ra en san Francisco, según lo 11::i,tentizan di.versos episodios. (15) Ibídem, n.209, p.250s. (16) S.BONAVENTURA, Legenda maior sancti Francisci, c.4, n.11, p.576s. 07) Speculum perfect-ionis, c.2, p.6; c.3, p.8s; c.11, p.29; c.41, p.73s; c.65, p.119. Compárese la epístola tercera de san Francisco ( Opuscula, Quaracchi 1949, p.109s) con el capitulo séptimo de la Regla II (ibidem, p.69s). Sobre la influencia de Hugol!no hablaremos más adelante. (18) CELANO, Vita secunda, n.67, p.171. « Absit, inquit, u nobis, frater curissime, ut pro quovis homine impie agamus in Beg·ulam. Malo te altare Virginis gloriosae nudare cum necessi.tas id requirit, quam contra paupertatís ·vot·um et observantiam evungeli\ aliquid ve! modicum attenti,re >l (S.BONAVENTURA), Legenda maior, c.7, n.4, p.586), 35
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