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E.x:istencia de la obligatoriedad. ~- En su exposición, Hugo de Digne sigue muchas veces a los Cuatro Maestros (51 ). Tam– bién él distingue en la legislación :franciscana instrucciones, consejos y preceptos, defendiendo que éstos obligan gravemente, en dependencia literaria del escrito de los doctores de París ( 52 ). Varias veces repite la misrna i.dea, sobre todo en el comefr tario a ls, f:rase del ca,pítulo. segundo Promittentes vitam istam et Regulam observare. La tnmsgresión de un consejo de la Regla o del prelado puede hacerse si.n culpa; la de una ainonestación, si.n culp8, mortal ; la de un precepto siempre lleva consigo pe– cado grave ( 53 ). ¿Cuántos son éstos en la Regla fn,mciscana? Además de las normas impuestas con los verbos praecipere y tene.rí ( 54) anota explícita o implícitamente por lo menos los siguientes: sólo los ministros p:rovinciales pueden recibir a los novicios ( 55), reci– tación del Oficio Divino ( 56) prnhibición de cabalgar ( 5'7), obser– vancia del ayuno ( 58), número de túnicas, andar descalzos ( 59), no tener propiedad en con1ún ( 60 ), predicar sin los requisitos enunciados en la, legislación un). Duda si. lo constituye la frase Pax huic domui que ésta aconseja decir al entrar en las casas (62). Si a ellos se afrnden los eminentes y virtuales, ordenados casi todos con los verbos praecipere y teneri, varían poco los estatutos graves enumerados por Hugo y los admitidos hoy en la Orden siguiendo la t:rayectorfa de Clemente V en su bula Exivi de Pa– radiso de 1312. Origen. - Al explicar la frase Promittentes vitam istam semper et Regulam obsernare (c.2), expone Hugo su teoría sobre la fuente de la obiigatoriedad grave de la Regla ( 63 ). Los frailes menores no prometen como otros religiosos vivir según la Regla o la corrección de costumbres según ella, lo cual impone una obligación menor de cumplir cada una de sus pres- (51) Compárese, por ejernplo, respeetivan1ente Sl~, con1entario fol.33vb,34ra,35vb-36ra, 36rb,36va,38va,48rb, con el de los maestros de Paris, p.127,123,133s,134s,136,141,160s. (52) HUGO DE DIGNE: « Videtur esse instructio et non praeceptum; a1ioquin fratres mortaliter peccare convincerentur~ si q_uem.libet reUgio:nem nostra.m petentem non n1itte– rent, quod nullus dicere ausus erit ,, (Expositio, c.2, fo!.33vbl. - CUATRO MAESTROS·. (< Quod si dicatur esse praeceptumr fro;tres peccare mortaliter convincuntur, si quemlibet religionem nostram petentem non nütterent ad rninistrum, quod nullus dicere aus11s est >) (Expositio, c.2,, p.127). (53) Expositio, c.2, fol.35ra. Cfr. c.2, fol.34vb. (54) Ibídem, c.2, fol.34vb-35va. (55) lbidem, c.2, fol.34ra.. (56) Ibídem, c.3, fol.37ra; c.2, foL34vb; c.6, fol.44vb. (57) Ibider11,, c.2, fol.34vb; De ftnibus p11upertatis, p.283. (58) Expositio, c.3, fol.37va. (59) De fi,nibus paupertatis, p.283. (60) Ibídem, p.283,286s; cfr. Expositio, c.6, foL42vb-4Gra. (61) Expositio, c.2, fol.34vb. (62) Ibídem, c.3, fol.38ra. (63) lbidem .. c.2, fol.34va-35ra. 104