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Al mismo tiempo, y aunque no faltan quienes lo niegan, hay que recooncer que la autoridad civil tiene poder para ligar gravemente las conciencias de sus súbditos. Para ello basta que fas leyes impuestas sean _justas y provean ail bienestar común de los ciudadanos 26 • Porque se admite como doctrina común que si el legislator manifiesta expressa o tácitamente su voluntad e intención de obligar en conciencia, ipso facto su ley importará e impondrá obliga:ción bajo pecado: « Omnes confüentur, si legislator expresse vel tacite significet velle ut Iex cons– cientiam alliget, ita ut eius violatio sit in culpa, eo ipso eiusmodi legem vim habere, quoniam lex humana potest conscientiam adstringere. Ergo si legislator suam mentem et animum declarat expresse ve] tacite, eo ipso conscientiam tenet ac ligat » 21 • Ahora bien; admitido que la obligación o no-obligación de las leyes en conciencia depende de la voluntad e intención del legislador, surge inmediatamente el siguiente interrogante: ¿puede decirse igualmente que la gravedad de dichas ,leyes o preceptos y de sus correspondientes transgresiones depende del querer del prelado o legis 1 lador? O ¿depen– derá más hien de ·su própio ohjeto o materia? Parn Azor está fuera de duda que, si la ley recae sobre materia realmente leve, no impondrá obligación sub gravi aunque lo quiera e intente el legislrndor. ¿Será, en cambio, posible que el 1legislador, redunciendo el peso prrop,io del objeto o materia, imponga obligación leve a una ley que recae sobre una materia indubablemente grave? El pensamiento de Azor sohre este punto particular no aparece suficientemente claro y preciso; pern creemos que el contexto de su exposición sugiere una respuesta nega– tiva: « Ex quibus verbis poss.it inferri lege humana ita conscientfam adstringi ut eius violator in lethalern c11lpam incurmt? ... Difficiile est certam aliquam regulam praescribere. Nihilominus tamen triplici ex C9!pite possumus eam elicere. Primo ex materia eius quod lege lmpe– ratur: secundo ex verbis quibus lex utitur: tert:io ex poenís... Primo verdaderas leyes. En el texto transcrito hace referencia a leges cfoiles et statuta. En otro lugar dice: « Compertum est et indubitatum leges quae solum sunt conventíones et pacta quas alioqui conventionales leges appellant, non alligare conscientiam ita ut eius omü;sío sit in vltio et culpa" (lbidem, col. 470 s.). 12 26 lbidern, col. 469 s. 27 Ibídem, col. 471.