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UN DÍPTICO THEGLÓGICO ~'RANCISCANO .satisfecho tanto como el ejemplo aportado por San Lorenzo de Brindis, la resurreción de Lázaro (23). La enfermedad de Lá~aro, .el recado enviado a Jesús por las hermanas dé aquél con todos l~s ,episodios que nos cuenta el Evangelista hasta la résurreción del -que llevaba tres días en el sepulcro, fué ordenado para la glo.; .rificación del Hijo, como nos lo ,dice el mismo Evangelista (24). Esta glorificación fué el fin, el porqué supremo de todos ellos, los que no fueron más que medios, camino para cdnseguirla. Fué por tanto la primera en la intención. Los diversos episodios que tuvieron lugar, subordinados a 1íin mismo fin último, estuvieron ligados y entrelazados como parte sde un todo, como medio a sus fines pró4hnos. ¿No pudo decir Lá"' :z.aro con razón que por él y para resucitarle, dió los, pasos que dió ,el Hijo de Dios y agradecérselo en consecuencia? Aplíquese este ,episodio de la muerte y de la tesurreeión de Lázaro a la muerte ,en Adán, del género humano y de su redención por Jesucristo y I <el género humano podrá decir con más razón todavía que Lázaro: ,Qui propter nos homines et propter nosíram salutem descendit de coelis et incarnatus est, y con mucha mayor razón tendrá que .agradecérselo a su Redentor. d) Es pues evidente que Jesucristo se encarnó, nació, v1v10, murió a fin de redimir al género humano, es decir, que todas .estas acciones de Jesucristo durante su vida mortal tuvieron ~orno fin próximo la redención del hombre caido. Por consiguiente bien pudo decir el mismo Jesucristo: Non egent qui sani sunt medico, sed qui male habent. Non veni vocare iustos sed pec– ,catores» (25). Y en otra ocasión: Non misit Deus filium suum in mundo ut iudicet mundum, sed ut salvetur mundus per ip– sum (26). Pudo declarar San Pablo con toda solemnidad: Fi– ,delis sermo et omni aéceptione dignus quod Christus venit in hunc mundum peccatores sal1Jos /acere (27). Pudo, en fin, el símbolo niceno resumir y expresar la fe inquebrantable de la Iglesia con ,estas palabras: Qui propter nos homines et propter nostram sa– .lutem descendit de coelis et incarnatus est. (23) El mismo santo Doctor multiplica los ejemplos, á fin de explicar su pe11samiento, v.gr. Samuel que marcha a Belén para huir de la cólera de Saul y ;para ungir a David por Rey; el viajero que había pei:¡sado visitar la ciudad de Roma, y se decide al ·mismo viaje por haber recibido una carta en la que se le ,comunica que un allegado suyo, que mora en dicha ciudad, se halla muy enfermo y Ao necesita, etc. Cf. Mariale, p. 81. (24) Jo.11, l. (25) Le. 5, 31-32. (26) Jo. 3, 17. (27) 1 Tim., 1, 15.

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