BCCCAP00000000000000000001291

VIDAL PÉREZ DE VILLARREAL El último versículo presenta una dificultad de expresión y comprensión, que no se aclara con ninguna de las traducciones actuales; he aquí la hipóte– sis de trabajo que presento para explicar la versión de nuestros arcaicos exe– getas. (Véase Glosario). Quarenta annos fui allegado a esta generacion y dixe siempre ve– rran estos de corac;on: mas ellos no conoscieron las mis carreras a los q uales iure en la mi ira que no entraran en la mi folgarn;:a. El subrayado presenta un término en abreviatura: "verran", que obscu– rece bastante la correcta comprensión del texto; en todas las versiones se ha– bla del asqueo que tuvo el señor con su pueblo; ¡nadie le hacía caso! Pero aquí, en el Libro de Horas, se presenta un término poco usado en– tre los israelitas; "verran" significa verraco o macho de los animales de cerda, considerados aún hoy entre el pueblo escogido, como inmundos. "Verraquea– ba... " el pueblo de Dios. Y los compara con ellos, no sólo por tratarse de ani– males inmundos, sino por el ronco y poco agradable grito o bramido que lanzan al aire en sus momentos críticos: "berraquean' 159 • Después del invitatorio, es de rigor en la tradición litúrgica monacal cantar un himno no bíblico, es decir, no perteneciente a los libros de las Sa– gradas Escrituras, aunque estén inspirados en ellas; son muy antiguos, de au– tores desconocidos, y de gran valor literario. Nota: Avanzado ya el desarrollo del tema, se observará que el Libro de Horas no usa ninguna mayúscula, excepto los inicios de capítulo o frase: dios, iesu, maria... Ya advertí que he procurado que la reproducción de los textos entresacados de este libro sea paleográfica. Por otra parte, creo que es hora de hablar algo de la forma escogida por mí y por el autor del Devocionario, para nombrar el nombre de Dios; este término Dios (del latín Deus) y del griego 8Q abreviatura de ⇒ Seós, (Zeus), supuso un gran esfuerzo de inculturación del monoteísmo judeo– cristiano con los usos de los pueblos griego y romano donde se fue exten– diendo el cristianismo; pero no es el nombre propio de Dios (sino el genéri– co dios de los dioses de las mitologías griega y romana); las iglesias judeocris– tianas lo escogieron para solucionar el problema y con verdadero éxito. Los judíos creían conocer el nombre de su Dios, pero existía entre ellos una tradición por la que no debían pronunciarlo ni siquiera en la oración, por respeto a su persona. Yahwe(h). Es el nombre que se ha considerado como el propio de Dios; no se ha aplicado nunca a falsas divinidades; significa el que es; es el nombre que escuchó Moisés del mismo señor 60 en el monte Sinaí. Los especialistas señalan que debe escribirse y pronunciarse Yahvé. Los judíos lo sustituyeron a partir del siglo I después de Cristo por el nombre de Elohim, para evitar que los cristianos hiciesen uso del nombre propio de Dios; se consiguió la sustitución, colocando en el tetragrama del nombre de Dios, JHWH, o 230 59 Ver Glosario. 611 Ex. 3, 14-15. [24]

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz