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ArtJI: Pobreza respecto de los bienes y del dinero (62-67) En este artículo y en los siguientes, el legislador se preocupa de establecer normas para la observancia concreta de la pobreza. A nosotros más que normas prácticas, nos interesan las motivaciones de fe y las exhortaciones a una vida de auténtica pobreza. Es significativo el aviso inicial: "guardemos la pobreza que hemos prometido, recordando la intención y las palabras de San Francisco "Los hermanos no se apropien nada, ni casa, ni lugar, ni otra cosa" sino que siguiendo el ejemplo de San Francisco "como peregrinos y extranjeros en este mundo, sirvamos al Señor en pobreza y humildad" 12 • Caminando hacia la patria celestial y conducidos por Dios, los hermanos deben desechar toda preocupación, poner sólo en Dios su confianza y fiarse de su paternal bondad. Ypuesto que los bienes de este mundo, aunque usados para las necesidades de la vida, para el apostolado, para la caridad sobretodo con los pobres, no deberán acumularse inmoderadamente, ni siquiera los necesarios para nuestro sustento, los hermanos deberán adquirir con su propio trabajo los medios necesarios para la vida, y cuando éstos no fuesen suficientes, o llegase a faltar, recurrirán con confianza a la mesa del Señor, no olvidándose de que mientras piden limosna, deberán ofrecer a los hombres el testimonio de pobreza, fraternidad y alegría franciscana 13 • Respecto al dinero, los hermanos deben esforzarse por perma– necer fieles a la voluntad del fundador, pero conscientes de que nuestros tiempos son notablemente diferentes a los vividos por Francisco y sus compañeros, pueden usarlo como un instrumento ordinario de cambio y de vida social, necesario incluso a los po– bres 14 • Particularmente están autorizados para usar dinero los superiores en virtud de su oficio, y también otros hermanos con 12 Const 62,1-2. 13 Const 63,1-4. 14 Cfr Const 64,1-2. 75