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TIBURCIO DE REDIN, TECNICO NAVAL mes de mayo de 1637 (erróneamente remonta el P. Anguiano al año 1636) comienza sus visitas al convento capuchino de extramuros. El padre guardián, Francisco de Calatorao, célebre predicador y director experimentado de almas, después de escucharle serenamente, intenta exElicarle con sinceridad el fuerte contraste entre los hábitos militares y los del fraile menor. Por si su demanda de hacerse religioso fuera simple reacción contra un desengaño profesional o afectivo, le sugiere un tiempo de espera en que se amansen las aguas. A que replica D. Tiburcio de Redín que data su vocación desde hace por lo menos siete años, «en cuyo discurso de tiempo han sido muchos los auisos que he tenido de Dios, aunque mi malignidad los ha resistido con tenacidad». Vistió el hábito capuchino en el noviciado de Tarazona el día 26 de julio de 1637. APENDICE I Felipe IV al duque de Cardona (minuta) 21 de octubre de 1635 «Al Duque de Cardona. A Don Tibur<;io de Redin he nombrado por Gouernador de la Armada que se ha aprestado en Barcelona de los quatro pontones y otras embarcaciones en la forma ae enten- te¡tC.-e, dereys por sus despachos, con los quales se presentará ante Vos; de su persona tengo parti- cular satisfacion y confian<;a de que ha de obrar en mi seruicio en esta ocasion conio lo ha hecho en todas las que se ha hallado. Encargo os mucho que en todo lo 'que os tocare acudays a la execucion de lo que se le encomienda y ayudeys a ello como lo espero y acos– tumbrays y que en lo que se offresciere le honrreys y hagays dél la estimacion que meresce, que sera muy de mi servicio. De, etc.». Archivo General de Simancas, sec. Estado, 2.656. 11 Don Tiburcio de Redin al Marqués de Villafranca Barcelona 4 de marzo de 1636 «Exmo. Señor. V.E. me manda salga con el Nauio La Corona y el Esquebe a buscar el tiempo en la Mar. Hago saber a V.E. que están faltos de todo, lo que es menester para sufrir vna tor– menta, y que al presente está el viento, por lebante, y la tierra nebada, conque será cierto rreinar Nortes y Nordestes, y las aguas ban para poniente; por estas causas, Señor, puede ser que obligue estar mucho tie?J-Pº en la Mar, y el no estar yo para tra~ajar por vn fluxo de sangre que me a sobre bemdo, y la orden que trahe el cabo_ que bmo es de que· no aliando orden aquí, dé quenta a Su Magd. para probeer lo combemente. [17] Supplico a V.E.que para mi descargo me dé la orden por escrito. Guarde Dios la grande<;a de V.E. como he menester. Barcelona, a 4 de Marzo 1636. Don Tibur<;io de Redin, Baron de Vigüe<;al». AGS, sec. Estado, 2.657 509