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58 Miguel Anxo Pena González Los autores entienden que esto cobra mayor fuerza desde el momento en que se comienzan a pagar derechos de aduana. Estos derechos se convertirán rápi– damente en asientos para la conducción de armazones de negros. Refieren cómo se administran los asientos, presentando además de la síntesis, una copia de cada uno de ellos; haciendo ver los cuantiosos beneficios que la Corona obtenía de esta práctica. El memorial refiere también la duración de cada uno de los asientos, dando a entender la continuidad que hay entre ellos. Después de referir la larga lista de asientos, hacen ver al monarca como, él mismo, "por c;édula de 31 de enero de 1682 se sirvió su Magestad de apro– bar la escriptura que sobre ello se otorgó por tiempo de otros c;inco años pagando en ellos un quento c;iento y veinte y c;inco mil pesos" 225 • Para referir seguidamente los asientos que fueron dispuestos posteriormente. Si con todo esto, al rey le pudiera quedar todavía alguna duda, conjuntamente con las copias de cada uno de los asientos, se le envían también "dos consultas del Consejo, una de 28 de abril de 1674, en que se dio quenta a la reyna madre nuestra señora, siendo governadora destos reinos" 226 , haciendo constar la res– puesta dada por el Consejo en aquella ocasión: "El Consejo propone mayormente quando es rierto que en las Indias no se puede pasar sin negros y <leve creerse que entrarán por otras manos" 227 • La segunda consulta completaba a esta primera, así unida a la influencia que la reina Mariana de Austria tenía en el débil Carlos II, se presentaba el jui– cio del mismo rey. Puesto que había sido él, quien seis años antes, había insi– nuado al Consejo la necesidad de hacer asientos, "para sacar utilidad de su venta y que acá se neqesita de ellos preqisamente para las Indias" 228 • De esta manera, el Consejo conseguía crear una fuerte confusión al monarca, vol– viendo contra él sus propias decisiones. Respecto de las juntas de togados y teólogos no daban respuesta por con– siderar era una cuestión zanjada en "la Posada del Señor príncipe D. Vizente Gonzaga, en que concurrieron demás de otros señores ministros, los señores D. Luis <;erdeño y D. Ioseph de Veytia y el ministro Cornejo, que por ser tan noto– ria no se expresa aquí su contenido" 229 • El segundo de ellos, del que sí consta fecha, pero no lleva título si señala los asistentes a la reunión del Consejo. Comienza presentando las dos pregun– tas del soberano, para posteriormente responderlas. Respecto de la convenien– cia de conducir negros a América, el texto no tiene desperdicio, ni requiere nin- 225 /bid., f. 3r. 226 /bid., f. 3v. 227 /bid., f. 4r. El subrayado es del documento. 228 /bid., f. 4v. El subrayado es del documento. 229 /bid.

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