BCCCAP00000000000000000001257

que intenta responder a las necesidades del momento, enten– diendo que la educación siempre es un medio multiplicador de posibilidades 143 • Estos proyectos educativos eran una herramienta muy útil al servicio de la configuración y unificación de la nación, por lo que la propia Corona intentará controlarlos y ponerlos directamente a su servicio. También en esa sincera y noble preocupación por elevar el nivel cultural de las gentes, así como por acercarlos más a Dios, surge el proyecto educa– tivo del Maestro Ávila, con una característica peculiar: que se trata de la organización pe proyectos sencillos, capaces de ser controlables y que puaieran ofrecer resultados segu– ros. Proyectarlos así suponía, además, distanciarse de una burocracia aplastante. Es significativo que, en este afán de transmitir un mensaje, no hay una pretensión por el número, puesto que con relación a proyectos educativos no hubiera podido llevarse a cabo de otra manera. En este sentido se ha de tener en cuenta que todos los cole– gios de la época tienen capacidad para un número limitado de colegiales, nunca más allá de treinta o treinta y cinco. Es evidente que una estructura limitada, en cuanto a su estruc– tura, permitía un control y acompañamiento mucho más cui– dado de qué y a quién se enseña. De esta manera, no era solo un control sobre los estudiantes, sino también sobre los profesores que, al ser necesarios pocos, podían seleccionarse con mayor atención. «Que se tenga en cuanto no solo que sepan la doc– trina cristiana de coro, más que la pongan en obra, pues va mucho en que se acostumbren a ser virtuosos [...]sí la Iglesia se ha de reformar, por aquí ha de ser el principio; y éste bien fundado, es más que la mitad de la obra» 144 • 143 Parece suficiente poner de relieve, a este respecto, la idea que Vives tiene de la enseñanza: «El vínculo social es la bondad; su gobierno, el juicio, donde reside la prudencia y la moderación de la vida universal; ma~ quien acrece la sabiduría es la práctica, mantenida por la memoria, pues serviría de muy poco el conocimiento y experiencia de tantas y tan grandes cosas, de no haber medio para conservarlas sin desaparecer y tenerlas a mano cuando fuese preciso».]. L. Vives, Tratado de la enseñanza, México: Porrúa 2004, 22. 144 S.JUAN DE Ávn.A, «Causas y remedios de las herejías», en Íd., Obras completas. II: Comentarios bíblicos. Tratados de reforma. Tratados menores. Escritos menores, F. MAR- 107