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MIGUEL-ANXO PENA GONZÁLEZ • 81 1789 por los. revolucionarios franceses, solían, realizando obra original, inspirarse parala· organización de los .nuevos Estados, en las ideas de justicia, igualdad y libertad de los pensadores de la Escuela salmantina de Francisco de Vitoria. La Independencia,hispanoamericana fue el.fruto natural del trasplante al Nuevo Mundo de la democrática institución del municipio castellano. En los Cabildos 1 los americanos aprendieron a go– bernarse por sí mismos y a defender su libertad. 13 Al mismo tiempo, e1'despotismo ilustrado de Carlos III,·la expulsión de la Compañía de Jesús y la supresión de las cátedras. de Suárez, así como la prohibición de explicar sus doctrinas, pudo llevar a unaruptura apa– rente con la Escuela.de Salamanca, especialmente.en España. 14 Lo que un día fue en España, durante el siglo xvr y XVII, doctrina común de la Escuela de Salamanca, se creyó en el siglo xvm doctrina jesuítica, por lo que sería rechazada y postergada. Peto esto no tuvo.las mismas conse– cuencias en todas partes, por lo que es posible que prevalecieran estas 13. R. Insúa Rodríguez, Historia de la Filosofía en Hispanoamérica, Guayaquil, Universidad de Guayaquil, 1945, p. 203. Acerca de este terna y a modo de ejernplo,cf J. Ma. Monsalvo, L,a. socie– dad pqlítica. en los concejos castellanos de la meseta. durante la época. del regimiento medieval:la distribución social dfl poder, s1, Fundación Sánchez_Albornoz, 1990; Idem, La Baja Eda4 Media en los siglos xiv:xv;p~líti~~ y 'cültura, Madrid,'Síri.tesis,2060; Idem, Gobierno municipa'/, poderes urbanos y toma de decisiones en los concejos castellanos bajomedÚvales (consideraciones a'¡ia.rtir de concejos salmantinos.y abulenses), Pamplona, Gobierno de Navarra, 2003. . " Ejemplo de e~to puede ser el cura independentista mexicano Miguel_ Hidalgo que, en 1767, había ingresado en el Colegio de San Francisco Xavier de Valladolid, donde había impartido Clavigero. La expulsión de los jesuitas hácé qué te~ga que interrumpir sus estudios para ~eán:u– dar!os al año siguiente en el Colegio de· San Nicolás, que mantendrá una línea más oficial y rega: lista. El detalle resulta interesante, puesto que nos muestra al insurgente COJ?. _una mentalidad claramente ~cléctica. Prueba de ello es su Disertación sobre el verdadero mitad~ de e~tudiar teo 0 lo– gía escoÍástica, en el que, al mismo tiempo qu~ cita a autores como Melchoi- Cario'Ío hace de ~ria línea más literaria-humanística como es el caso del cardenal Aguirre. Será interesante un análisis profundo de.su Disertación, puesto que por ella recibe un premio y la felicitación epistolar de José Pérez Cálárna, Chantre de la catedral de Valladolid y regalist_a de prün~r~.Jú,lea, Para un análisis·directo de las fuentes, cf M. Hidalgo y Costilla, Disertación sobre el verdadero método de estudiar teología escolástica. Compuesta por el Br. Don Miguel Hidalgo Costilla, Catedrático que fue de La.tinidad y Artes en el Real y más antiguo Colegio de San Nicolás Obispo, de esta Ciudad de Valladolid, Colegial de oposición y Catedrático de Prima de Sagrada Teología en el mismo Co– legio, Michoacán, Universidad Michoacana, 1958; J. Pérez Cálarna, "Carta de J. Pérez Cálama a M. Hidalgo Costilla (1784)", en Id., Escritos y Testimonios, E. de la Torre· (ed.), México, UNAM, 1997, pp. 143-144, Apéndi~e.
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