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INFERNUKO-ERROTA. MOLINOS DEL VALLE DE BAZTAN I. EL APEO DE 1726 En estos molinos del Valle de Baztán se da una característica común: casi todos pertenecían a porcionistas de los lugares próximos al molino y casi siempre se subraya que junto a ellos no existía vivienda para el molinero; solamente disponía este artesano de un pequeño rincón donde preparar sus comidas y descansar, porque el trabajo era constante y había que aprovechar el agua lo mismo de día que de noche, ya que su retribución dependía de la cantidad de grano molido; eran molinos de maquila 6 • He aquí agrupados los datos referentes a molinos del apeo de 1726. Valga para todos los casos la referencia anterior. 1. El molino de Azpilcueta era del Conde de Xabier y de numerosas familias del lugar y el molinero se llamaba Martín de Zelayeta; tenía este artesano su residencia en la casa Migueltorena del mismo pueblo. Se trataba sin duda del actual molino de Sartola. 2. Se describían dos molinos para Arizcun. El de Ursúa, propiedad del Conde de Xerena, del Palacio Cabo de Armería, conocido como Palacio de Ursúa por proceder de él esta ilustre familia; Juan de Biñatena era el moline– ro y vivía en el barrio de Bozate o de los Agotes, en la casa Martineneberría. El otro molino se llamaba simplemente de Arizcun, por pertenecer a porcio– nistas del pueblo; su molinero, Pedro de Estebarena, vivía en la casa Juanare– na de Azpilcueta. 3. En el apeo de Errazu se hablaba de otros dos molinos; existen ambos en la actualidad: uno junto a las casas de Iracelaya, de particulares; el moline– ro, Joseph de Echeberría, vivía en Arizcun, probablemente en Bozate. El segundo se conocía y se conoce con el nombre de molino de Zabaleta; también era de particulares, trabajando como molinero por esos años, Juan de Amorena, residente en Arizcun (¿Bozate?). 4. En el de Elvetea se hallaba un molino con habitación y hogar para el molinero, excepción a la regla general junto con el molino de Zozaya; estaba debajo de la casa Gaztelúa y era propiedad de don Sebastián de Borda y Bergara, del Palacio de Jarola; el molinero se llamaba Miguel de Marichalar. Situado paralelo al río Baztán, disponía de un salto de agua poco efectivo y su corto cauce se inundaba fácilmente con las fuertes crecidas del río; en el pasado siglo se le substituyó por «el molino nuevo de Elvetea» que aprove– chaba un rápido del caudaloso arroyuelo procedente del pequeño rincón de Bearzun-Fuentehermosa 7 • Recientemente se ha reconstruido el edificio del molino ·de Gaztelúa y se puede recorrer con facilidad su antiguo cauce de alimentación ya seco y rellenado de tierra vegetal. No lo describí en la citada monografía por ignorarlo. 5. Elizondo: se señalaba en el apeo para este lugar el molino de Echaide del barrio del mismo nombre; pertenecía a porcionistas de Elvetea y Elizon- [3] 6. PEREZ DE VILLARREAL, Vida!: Molinos y molinería..., Op. cit. pág. 236. 7. ONDARRA, F.: Op. cit. pág. 19. Recogía yo en Molinos y molinería... el dicho popular: «Heredad por heredad, molino de pan en arroyo, que no en caudal». Op. cit. pág. 226. 181
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