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Su apostolado en Cuba 115 dos y Misionerns, quiso que todos ellos se reunieran en su Pa– lacio de Santiago, para practicar los ejercicios espirituales, al modo que Jesucristo, divino Pastor de las almas, llamó a sus Apóstoles al desierto, a la soledacl, para descansar de sus fati– gas y tareas Apostólicas y vacar a la oración, diciéndoles: « Venite in desertum locirm et requiescite pusillum»: Venid a un lugar desierto y descansad un poco. He aquí el motivo del viaje que hizo el Siervo de Dios desde Mayari-Abajo a la capital del Arzobispado, como el mismo nos lo relata en las siguientes palabras: «Estando en la misión de Maya– ri, recibí una carta del Señor Arzobispo, escrita en Holguín, en la Santa Visita, en la que se me decía que él para la Sema– na Santa pensaba estar en Santiago y que después de Pascua, haríamos los Santos Ejercicios, a fin de sacudir el polvo que se nos había pegado, predicando a los otros, y que des– pués nuevamente comenzaríamos las tareas apostólicas; así, pues, que nos esperaba antes o después de Pascua.» »El 13 de Abril, tercer día de Pascua de Resurrección, sali– mos de Mayari-Abajo, y en más de dos leguas nos acompaña– ron el Señor Oornamlante y los principales Señores de la po– blación. Desde Mayari cuentan 30 leguas hasta Santiago; pero nosotros caminamos por los pinares, pues se abrevia bastan.te . A las dos leguas co:nienza la montaría, y la subida es esca– brosa. Al llegar a la cima, no se oyen sino cánticos de ruise– ñores y la vista se pierde en aquel vasto pinar. Quedamos ad– mirados al ver que los pinos son idénticos a los de Europa; tienen resina; son pinos vastos, altos, corpulentos y lisos como los abetos. ¡Qué riquezas tiene aquí el Gobierno y no saca ninguna utilidad de ellos! Más de 30 leguas hay de montaña de Oriente a Poniente. Se hallan tres arroyos en lo más eleva- ,do y se conoce que las aguas nacen de minerales; son crista– linas, frescas y saludables; el arroyo del Medio y del Naranjo son bastante caudalosos . »En lo alto de la montaña se encuentra un llano de 4 o más leguas de Norte a Sur, cubierto de pinos: se hallan helechos lo mismo que en los Pirineos, pero son eomo árboles, con tron•