BCCCAP00000000000000000001226

Su apostolado en Cuba tantes menos, resultando que en los siete meses estuvo todo el tiempo materialmente ocupado en las misiones o en los viajes– de ellas, excepto lm; pocos días que permaneció en Santiago,. con motivo de la grave enfermedad ele su compañero. Anduvo,. ele una misión a otra, entre tocios los viajes que hizo, como• unas 120 leguas por malísimos caminos, debido al mucho barro y fango que en ellos había, y expuesto a las lluvias, que, como él dice, eran casi diarias; y creemos, aunque no lo• dice en sus apuntes, que muchas veces los hacía a pie, cuando le era posible, pues nos consta que en otras ocasiones así lo, hizo, y aun cuando regresó a España, siendo casi septuage– nario, iba ele una misión a otra a pie, como buen hijo ele San Francisco; a lo sumo viajaba a caballo por aquellas tierras, . no dejando de ser muy molestos estos viajes en semejantes. condiciones. Así, pues, no se sabe qué admirar más, si la for– taleza de su cuerpo o el temple extraordinario ele su espíritu. Las comuniones que se hic·.ieron fueron 8.033, y los matrimo– nios celebrados suman 711, sin contar otros muchos divor– ciados que se unieron con sus legítimas esposas, y varios amancebados que se separaron; y si no fueron tantos en rníme– ro corno los que veremos al siguiente año, clebióse a que las referidas misiones se dieron en pueblos relativamente poco– numerosos y cuyos habitantes vivían muy diseminados por los campos.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz