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..... • vieron y creyeron" (S. Juan, XX, 29), con lo cual nos indica que el contacto con El por medio de la fe tiene más eficacia y nos es más provechoso que su misma presencia te– rrenal. Y son ele San Agustín aquellas palabras: ¿Cómo podemos tocar a Cristo una vez que ha subido al cielo? Y responde: por la fe toca a Cristo quien cree en El. El medio ele ponernos en contacto con Cristo es la fe, la fe en la divinidad, en su omnipotencia, en el valor infinito de sus sa– crificios, en la eficacia inagotable de sus méritos. Toquemos a menudo por la fe a Jesucris– to si queremos santificarnos rápidamente. FRUTO DE LA FE De la práctica ele esta virtud de la fe, de este mirar y tocar a Jesucristo por la fe, brota naturalmente la virtud ele la esperanza. Esta esperanza está fundada en el hecho de que Cristo padeció voluntariamente por nosotros y nos substituyó quedando Dios aplacado hasta el punto de olvidar nuestras ofensas y haciendo_ que las satisfacciones y méritos de Cristo nos sean propios por la unión que con El tenemos por medio clel cuerpo místico. A pesar, pues, de nuestros pecados s01nos 6o

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