BCCCAP00000000000000000001213

que el papá había mandado no quedarse. Saiikí engañó a Sabaseba. «Que se marche rápido», dijo. Y por eso lo convirtió en Saakí. 1.2. SEGUNDO RELATO Original de Pablo Akairogbá Traducción de Jesús Bakéki Sabaseba existía antes de salir el sol. Sabaseba, cuando ya estaba cansado, les dijo a los barí: «Vosotros mismos tenéis que hacer de sol». Sabaseba pensó que iba a ir con ellos. Sabaseba cada día hacía su viaje, siempre desde el mismo sitio, hasta llegar a donde vivía barí. Sabaseba se acostaba en chinchorro. Y les dijo: «Vosotros mis– mos tenéis que hacer de sol». «Vosotros mismos podéis buscar para hacer la corona como el tucán -loro-. Con esta corona de plumas se puede hacer el sol. El agua puede hacerse donde nace el sol. Allá hay suficiente agua para poder tomar y poder vivir». · En un tronco grande de palo se oía como ruido de agua. Era agua. Sabaseba iba a acompañar a barí para que tumbase árbol. Y él ayu– daba a tumbar árbol a barí. Cada vez que pasaba por allí, oía esos ruidos dentro del árbol. «Puede haber agua», decía Sabaseba a los barí. Del árbol va a salir agua que va a correr por la tierra. Y el que hizo de sol se va a ir para siempre al cielo. Para que luciendo él, se pueda trabajar durante el día. {Repite otra vez: del árbol...). Sabaseba se cansaba de trabajar. «Yo también voy a comer la piña: ¿ Dónde está la piña para poder comer?». Y se encontró con que den– tro de la piña había una pareja de barí. Iba a comer y se levantaron de la piña una pareja. Iba a comer, pero, a la vez, salía barí. (Repite: salió una pareja. Iba a comer, partió y salió una pareja). Y les dijo Sabaseba: «Vosotros vais a ser barí». Otro día, parte la piña y sale, de nuevo, otra pareja. Y les dijo: «Vosotros vais a ser barí, y os vais a quedar para siempre en la tie– rra». «Vosotros os vais a quedar aquí para trabajar y alimentaros, vosotros y vuestros hijos». Al barí que hizo de sol le dijo: «Tú vete a donde nace el sol para iluminar durante el día a los barí». «Donde sale el sol puede encontrarse agua». «Nosotros dos -~andóu y Sa– baseba- y otro barí podemos ir a tumbar árbol para que haya agua». El comunica con los barí, pero cada día hace su viaj,e. Viene por la mañana y retoma de noche a su lugar. (Repite: «Tú mismo harás de sol, etc.». «Tú puedes hacer de sol»). Sabaseba, cada vez que hacía el viaje, se encontraba dos árboles en fos que dentro se oía ruido como de agua. Entonces dijo a barí: «Vosotros podéis tumbar ár- . boles para tener agua». Al principio se veía por fuera del árbol caer el agua y se oía mucho ruido dentro de los dos árboles. Donde se hizo el sol, tumba Sabaseba dos árboles para que hubiese agua y. 331

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz