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tiraron todos los tabiques, dejando un pequeño rinconcito junto al tejado para las religiosas. Como estas obras se prolongaron, la Comu– nidad regresó a su amado monasterio el 2 de marzo de 1939. De 13 monjas que salieron, volvían 10. La situación de vida en aquel monasterio convertido en prisión era embarazosa y molesta para las religiosas que tenían que vivir junto a las mujeres encarceladas, pro– tegidas por Celadoras. Mucho más se agravó el estado de ánimo de la Comunidad cuando se les puso ante esta disyuntiva: O hacerse cargo de la prisión o dejar sus habitaciones para otras religiosas. Después de orar y reflexionar, el 23 se septiembre de 1940 se hicieron cargo de la prisión, sufriendo mucho al ver tanta miseria material y espiritual que allí había. No obs– tante, la reclusas les trataron siempre con respeto y hasta con venera– ción. La prisión duró hasta agosto de 1943. No se acabaron las penas al marcharse las presas, ya que el monasterio quedó deshecho y con poca esperanza de poderlo arreglar. Hicieron varias instancias a las autoridades para que lo arreglaran, y hasta febrero de 1946 no consiguieron nada. Al fin, les concedieron 78.000 ptas. con las cuales arreglaron la tapia de la huerta, algunas habitaciones y lo más urgente y preciso. Por todas partes había goteras y destrozos, y para arreglar lo más necesario necesitaban por lo menos un millón. 4. Fusión con las monjas de Abiego Un hecho notable en la historia última de este monasterio fue la fusión del convento de Abiego (Huesca) con este de Barbastro, en el año 1946. Las monjas de Abiego eran clarisas que habían sido funda– das en 1913 por las Reales Descalzas de Madrid. Fue el día 11 de diciembre de 1946 cuando llegaron estas 10 reli– giosas de Abiego, que estaban refugiadas en Alagón, desde que termi– nó la guerra civil, y no podían regresar a su convento por encontrarse en situación inhabitable. El Sr. Obispo de Huesca, que por entonces era Administrador de Barbastro, con acuerdo de ambas comunidades hizo la fusión. Ellas sacaron de su primitivo convento muchas ropas y muebles, y también trajeron 70.000 ptas. en papel del Estado. -44-