BCCCAP00000000000000000001212

CONCLUSIÓN A lo largo de estas páginas hemos hecho un breve recorrido por cada uno de los Monasterios de Clarisas y Capuchinas de Aragón. Muchas cosas se han quedado sin decir, ya que cada monasterio tiene una gran historia, tras muchos siglos de existencia. Con la ayuda de las Hermanas Clarisas que me han proporcionado los datos más importantes, hemos hecho esta reseña de carácter más bien histórica. Quiero terminar resumiendo en pocas líneas algo que considero lo más esencial y que quizás no ha aparecido con claridad aquí. ¿ Qué significa ser Clarisa hoy? He aquí algunos de los elementos que confi– guran su vida y espiritualidad. l. El Evangelio como norma de vida "La forma de vida de la Orden de las Hermanas Pobres, instituída por el bienaventurado Francisco es esta: Guardar el santo evangelio de nuestro Señor Jesucristo, viviendo en obediencia, sin propio y en cas– tidad". (Regla de Santa Clara, Cap. I) A lo largo de la vida, la única ley que estimula, anima e ilumina sus pasos no es otra sino el Evangelio de Jesús, su vida , su cruz, su muerte y resurrección. 2. Ser testigos de Dios en el mundo La tarea primordial de las Hermanas de Santa Clara es orar con la mente y el corazón, con los labios y con la vida, siempre y en todo lugar. Ver a Dios en cada persona, en cada cosa, en cada aconteci– miento. Rezar y cantar alegres las alabanzas del Señor. -125-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz