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nos de Huesca luego que se fundó, colocándola a sus expensas en la capilla más inmediata a la puerta, entrando a la izquierda" 1• Es posible que a las puertas de este convento llegase un día, pidiendo el hábito capuchino, un joven de Alquézar, que ha pasado a la historia con el nombre de P. Joaquín de Alquézar, de la provincia deAragón. l. Viaje a las Misiones de Venezuela Después de ingresar en la Orden Capuchina y realizar sus estu– dios para ordenarse de sacerdote, el P. Joaquín de Alquézar se decidió a marchar a las misiones de Cumaná, donde los capuchinos aragone– ses trabajaban con un celo digno del mayor elogio. El célebre misio– nero P. Francisco de Tauste había pedido al Consejo de Indias, el 5 de abril de 1680, autorización para llevar consigo hasta 14 religiosos con destino a las misiones de Cumaná, lo cual le fue concedido'. Uno de estos 14 capuchinos era el P. Joaquín de Alquézar, quien acompañado del P. Tomás de Barcelona y Fr. Raimundo de Figarola, embarcó en el navío "Santo Cristo de Caracas", el 11 de julio de 1680. Una vez en Cumaná , el P. Joaquín de Alquézar se dedicó a la evangelización de los indios. A partir del año 1682 se hizo cargo de la población de San Juan Bautista. Según dice el P. Manuel de La Mata, trabajó allí con igual espíritu y fervoroso celo que lo había hecho su antecesor el P. Juan del Pobo. Sin embargo, a poco de haberse hecho cargo de San Juan Bautis– ta, fue asaltado el pueblo, el 17 de septiembre de 1684, por varios encomenderos de aquella provincia, coadyuvados por indios caribes. l. RAMÓN DE HUESCA, "Teatro Histórico de las Iglesias del Reino de Aragón", Tomo Vll, págs. 75-82. 2. Licencia pedida por el P. Francisco de Tauste para llevar 14 religiosos, Madrid 5 abril 1680. (AG!, "Santo Domingo", 222). - 156-