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Afirma que no se había logrado el fruto deseado por no tener a la vista estas misiones un pueblo de españoles para sujetar a los indó– mitos que no quieren ser cristianos ni rendir vasallaje a su rey y señor, por ser gentío que sólo le trae a las misiones el temor, y fal– tando éste, se vuelven a los montes, donde hay dos veces más cristia– nos fugitivos que en todas las misiones juntas, y lo más lastimoso es que los que no viven en ella, no los podemos reducir ni con el ejem– plo, doctrina ni amonestaciones a que vivan como cristianos, obran– do sólo en ellos el temor del castigo'. - El 2 de agosto de 1695 manda otro informe al rey el P. Loren– zo, y entre otras cosas, le plantea dos cuestiones. En primer lugar, vuelve a insistir sobre la necesidad de tener un pueblo de españoles. Dice que el rey había mandado en 1676, por una cédula suya, que tanto en Caracas como en Cumaná se hiciese un pueblo de españoles para la sujeción de los indios. Y para que eso pudiese tener lugar, el mismo P. Prefecto había pedido fuesen familias de Canarias para formar dicho pueblo y asimismo diez religiosos para aumentar el número de los que allí había. Termina diciendo que desgraciadamen– te ni se enviaron religiosos ni tampoco lat familias'. Era voz común entre los misioneros la necesidad de un "pueblo español" pero no sólo para sujetar a los indios, sino, como expresa muy bien Fray Sebastián de Puerto Mahón, para darles una mejor educación humana, y cristiana. Dice que "lejos del idealismo pacifista de los primeros misioneros, los indios necesitan el contacto con hom– bres distintos de los misioneros, hombres que les enseñen insensible– mente y en forma práctica "un género de vida seglar". No se pueden formar los indios a imagen y semejanza de los misioneros, porque no todos los indios son, ni pueden ser, ni han de ser Capuchinos ni en el oficio, ni en la perfección; antes es menester que vean a otros casarse, acudir a la doctrina, sufrir castigos y multas y temer las censuras de la Justicia. Esto es política humana, y por falta de españoles vamos al revés, pues primero los queremos santos que hombres"'. 6. Carta del P. Lorenzo al Rey, Santa María de los Angeles, 2 de julio de 1695. (AGI, "Santo Domingo", 641, Nº 14). 7. Informe del P. Lorenzo de Zaragoza,. Santa María de los Angeles, 2 de agosto de 1695 (AGI, Santo Domingo, 641). 8. Memorial del Fr. Sebastián de Puerto Mahón, 1696, (AGI, Santo Domingo, 641). - 121-