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después de caído en el suelo, a macanazos le dt;sguajaron un hom– bro, muriendo en su compañía un muchacho de diez años; que lo lle– varon a enterrar a la iglesia de Cumanacoa los mismos vecinos y que allí estuvo sepultado hasta el año 1691 en que el P. Antonio Torrela– cárcel, siendo Prefecto, trasladó sus reliquias a la misión de Santa María de los Angeles donde se conservan. Su martirio tuvo lugar el 5 de febrero de 1683 8 • Esta interesante información jurídica del martirio del P. Miguel de Albalate, la mandó hacer el entonces Prefecto de la misión, P. Francisco de La Puente, a fin de enviarla luego al Comisario General de las misiones. Por eso, esta exposición que nos ha hecho el P. Anguiano, con tanto detalle y emoción, va cargada de un gran realis– mo, encaminada a promover su causa de beatificación. 4. Otros testimonios del martirio del P. Albalate El P. Francisco de La Puente, como. Prefecto de la misión, pre– sentó un memorial el 30 de mayo de 1683, al Vicario y Cura de San Baltasar de los Arias, a fin de que, por ser el cura más cercano y suceder la muerte del P. Miguel dentro de su vicaría, hiciese una información jurídica de esta circunstancia, respondiendo a estas pre– guntas: a) Si le mataron los indios; b) Si padeció la muerte voluntariamente y sin resistencia; c) Si fue "in odium fidei", directa o indirectamente. También le pedía se hiciese la conveniente investigación sobre la muerte del niño que le acompañaba, llamado Manuel Lorenzo de Vera. El cura de San Baltasar de los Arias, D. Lorenzo Márquez, Juez eclesiástico en dicha ciudad, en el valle de Cuamancoa, mandó se citaran los testigos que habían sido designados, el 5 de junio de 1683. 8. CARIÑENA, "Memoria de los religiosos etc.." (AGI, Santo Domingo, 642). -111-